SESIÓN DE CONTROL AL GOBIERNO

Contratación reconoce a Dragados 28.000 euros por la paralización de la obra de la Estación

El Gobierno local aguarda la respuesta de la empresa a su valoración para remitir un informe al Consejo de Estado a fin de que el órgano consultivo se pronuncie sobre el litigio. La obra de la Estación de Ferrocarril permanece paralizada desde 2008. 

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photo_camera Fachada principal de la Estación de Ferrocarril/ ANTONIO SEMPERE

El Gobierno de la Ciudad aguarda una respuesta de Dragados, empresa adjudicataria de las obras de la Estación de Ferrocarril, para remitir al Consejo de Estado un informe sobre las discrepancias suscitadas en torno a la ejecución de los trabajos de rehabilitación del edificio. El organismo consultivo deberá ahora pronunciarse sobre el litigio.

Así lo ha anunciado la consejera de Economía y Hacienda, Susana Román, en respuesta a una interpelación planteada por el grupo parlamentario Caballas en el transcurso de la sesión de control al Gobierno celebrada esta mañana.

La consejera ha precisado las gestiones que el Gobierno ha desarrollado a lo largo de los últimos seis meses para intentar promover un acuerdo con Dragados. Una de las diferencias que separan a las partes e impiden la continuación de la obra se encuentra en el requerimiento a la Ciudad del pago de 600.000 euros en concepto de daños y perjuicios que plantea la empresa. Un informe con fecha del pasado día 20 evacuado por el negociado municipal de Contratación reconoce a Dragados el derecho a percibir sólo 28.000 euros. El documento ya obra en manos de la compañía.

El diputado de Caballas Juan Luis Aróstegui ha juzgado insuficientes las explicaciones de Román, a la que ha acusado de abstenerse de defender los intereses generales en este litigio. “Si hubiera verdadero interés, el contrato se habría rescindido en diciembre, pero ustedes prefieren hacerle el juego a la empresa”, ha acusado el diputado.

El pasado diciembre, Román anunció que el Gobierno no descartaba volver a licitar la obra si en 15 días no se alcanzaba un acuerdo con la adjudicataria. El propio presidente de la Ciudad, Juan Vivas, confió en mayo de 2015 a los vecinos de la barriada que la obra estaría acabada a finales de ese año.