Es nada menos que la bellísima Hailey Tuck la que llega a Ceuta, una especie de mezcla entre Billie Holiday y Ella Fitzgerald, aunque ella diría que no es para tanto.
Sí que lo es. Tiene una voz verdaderamente prodigiosa y con sólo 23 años, esta texana se ha convertido en una depositaria de la tradición jazzística de los años 30 del pasado siglo. Viene de la mano de la Consejería de Educación, Cultura y Mujer.
Se viste hasta con ropas parecidas a las de las divas y también a las de su compatriota, de origen ruso, Regina Spektor.
Nació y se crió en Austin, capital de Texas. Su educación fue baptista y también militar. A los 18 años cambian las cosas: sus padres le regalan un fondo económico para completar su educación y Hailey Tuck hace lo que nadie se espera. Allá va y se compra vestidos ‘vintage’ y un vuelo de ida –no de vuelta- a París.
Se convierte, de día y de noche en una de las favoritas de la escena ‘underground’ y se atreve a versionar a Bob Dylan, The Zombies y Maroon 5.
Vuelve a Austin, pero cambiada. En su ciudad natal actúa en clubes de jazz, como el legendario Elephant Room.
Gana dinero. Mucho dinero. Y graba. Da el salto y vuelve a París para establecerse y continuar con su senda. Ahora, en Ceuta.
