la cece discrepa del delegado

"Una frontera puede ser segura y, al mismo tiempo, fluida", defienden los empresarios

La Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE) ha instado a la Delegación del Gobierno a proponer medidas que favorezcan el desarrollo económico de la ciudad sin necesidad de escoger entre el comercio transfronterizo y el desarrollo turístico. El delegado del Gobierno aseguró este lunes que ambas actividades resultan "difíciles de compatibilizar".

Los empresarios ceutíes han recibido con sorpresa las declaraciones del delegado del Gobierno, Nicolás Fernández Cucurull, por las que consideraba incompatible mantener la actual actividad comercial a través de la frontera y procurar el desarrollo de la industria turística. En los actos de celebración del día de la Policía Nacional, Fernández Cucurull, también aseguró que la fluidez en el paso fronterizo estaría condicionado a los criterios de seguridad.

“La sensación que da es que no se prevé una solución o una estrategia para arreglar el problema”. Ésta es la impresión que el secretario general de la Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE), Alejandro Ramírez, ha confesado haber sentido ante las palabras del delegado.

El representante de la organización empresarial ha insistido en la necesidad de desarrollar una estrategia que no convierta la seguridad en un pretexto para renunciar a la fluidez en un paso fronterizo caracterizado desde hace años por frecuentes episodios de congestión en el tráfico de personas y automóviles. “Sabemos que la seguridad es primordial, no cabe duda, pero eso no significa que no pueda haber una fluidez en la frontera: una frontera puede ser fluida y, a la vez, segura”, señala el secretario general de CECE.

Ramírez considera necesario garantizar la compatibilidad entre el comercio fronterizo y el desarrollo de la industria turística dados los beneficios que ambas actividades reportan a la economía local. Según sostiene el portavoz de los empresarios, para este fin resulta imprescindible adoptar medidas orientadas a la ampliación y mejora de las infraestructuras fronteriza y al incremento de las dotaciones de personal. “Lo que no podemos hacer es cruzarnos de brazos”, concluye el secretario general.

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