El porteo de mercancías dará una tregua de diez días a la ciudad. Las festividades de Marruecos que se celebrarán a lo largo de la próxima semana convertirán este jueves en el último día de trabajo para porteadores y coches pateras hasta el 3 de julio.
La suspensión de las actividades concede a las autoridades españolas un plazo extraordinario de tiempo para reevaluar las medidas con las que se ha pretendido combatir los atascos de tráfico durante las últimas semanas.
Reestablecida la “pacificación” del paso peatonal, donde se ha estabilizado un flujo diario de personas del entorno de las 2.000, el problema radica ahora en controlar las concentraciones de vehículos que continúan ocasionando retenciones a lo largo de la nacional 352. Durante la jornada de ayer se logró dar salida hacia la frontera a miles de coches, aun cuando se registraron por la tarde esperas que se prolongaron en algunos momentos hasta dos horas.