El Grupo Parlamentario Socialista pretende que se siga el rastro de los excrementos caninos abandonados en las calles mediante una prueba de ADN a fin de dar con el paradero de los propietarios de los animales. Los socialistas proponen esta medida como un medio para sancionar a los dueños de los perros que no recogen las deposiciones de sus mascotas.
Los diputados presentarán en la sesión plenaria de la Asamblea que se celebra este jueves una moción por la que solicitan la elaboración de un banco genético canino. Además, reclaman que esta prevención se recoja en la ordenanza municipal de limpieza y el reglamento de tenencia de mascotas.
Los socialistas también demandan la elaboración de un mapa de excrementos que permita determinar las áreas donde su presencia es mayor y, de este modo, incrementar la vigilancia, en especial en las zonas cercanas a colegios, guarderías y parques infantiles.
Trabajos a la comunidad
Por otro lado, el Grupo Parlamentario Socialista instará al Gobierno a que los servicios técnicos realicen las modificaciones oportunas en las normas de la ciudad para elaborar una reglamentación que permita el cumplimiento de determinadas sanciones, como por ejemplo, las multas de tráfico mediante trabajos para la comunidad y de carácter social, en vez de aportaciones económicas, especificando en esta reglamentación las condiciones que deben requerirse para poder acogerse a esta medida.
Los socialistas creen que debe tenerse en cuenta "las circunstancias económicas y sociales por las que atraviesan muchos de nuestros ciudadanos para los cuales una sanción económica no hace sino agravar sus circunstancias”.
