la biblioteca y los mercados, objetivos

El Palacio de la Asamblea, nuevo espacio cardioprotegido

El Ayuntamiento dispone ya de un desfibrilador externo semiautomático (DESA) y personal formado en su manejo. La Ciudad extenderá esta acción a lugares como la Biblioteca Adolfo Suárez y los mercados central y de Hadú, entre otros

Foto Sanidad - Desfibrilador - DESA - Palacio Asamblea
photo_camera De izquierda a derecha, la directora general Rebeca Benarroch, la consejera Adela Nieto y las técnicas del área Ángeles Rivas y Laura Arce / CEDIDA

La Consejería de Sanidad, Servicios Sociales, Menores e Igualdad ha ampliado la zona de espacios públicos cardioprotegidos con la instalación de un desfibrilador externo semiautomático (DESA) en el Palacio de la Asamblea. Con este, Sanidad eleva a diez las dependencias públicas que disponen de esa herramienta, capaz de salvar vidas y sobre cuyo manejo la Consejería se ocupa de formar al personal que trabaja en las instalaciones y que habría de utilizarlo en caso de necesidad.

Al Palacio Autonómico se sumarán en fechas próximas como lugares cardioprotegidos la Biblioteca Adolfo Suárez, el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) y un aparcamiento a determinar por la empresa pública que los gestiona (Amgevicesa). Asimismo, donados por la Fundación Chocrón Macías, contarán con desfibrilador los mercados central y de Hadú.

Los espacios por los que comenzó la instalación de desfibriladores externos semiautomáticos fueron los polideportivos Díaz Flor y Guillermo Molina, el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de la Ciudad, la Autoridad Portuaria y el Parque Marítimo del Mediterráneo, en el caso de estos dos últimos puntos, por gentileza de la Fundación Chocrón Macías; y después de estos han sido dotados con sendos DESA el Teatro Auditorio del Revellín, la Unidad Móvil del Área de Coordinación de Emergencias (ARCE)-Protección Civil de la Ciudad, el Campus Universitario y el Ceuta Center.

En España se estima que cada año se producen más de 30.000 paradas cardíacas, lo que equivale a una media de un paro cardíaco cada 20 minutos. El desfibrilador externo semiautomático es de fácil manejo y posibilita intervenir en los primeros minutos una vez ocurrido el paro.

La efectividad de la desfibrilación temprana en la recuperación de un ritmo cardíaco eficaz es de un 90 % cuando es posible efectuar esa desfibrilación en el primer minuto de evolución de la de la fibrilación ventricular. Pero esa efectividad disminuye muy rápido: por cada minuto de retraso se reduce la supervivencia entre un 7 % y un 10 % y, transcurridos 10 minutos, las posibilidades de sobrevivir son mínimas.