Este lunes se ha restablecido el paso de mercancías por parte de las porteadoras, que en un número superior a las doscientas han decidido transportar en sus espaldas los bultos en dirección al país vecino. Ello sucede después de que los empresarios de El Tarajal 2 decidiesen la semana pasada no cobrarles la tasa.
Por la tarde y con la apertura de la Puerta Norte, la actividad de paso de mercancías se limita a lo establecido en régimen de viajero, por lo que el bulto no puede circular.
Pese a la prohibición, son cientos los porteadores y los vehículos que están intentando acceder al país vecino por la frontera de El Tarajal. Este hecho ha provocado que las aledañanas y la Nacional 352 se haya visto totalmente colapsada de vehículos y personas.
Las colas en la vía han llegado hasta la zona de la guardería La Pecera, en los bajos de Juan XXIII. Durante el recorrido hasta la frontera, tanto la Guardia Civil como la Policía Local tienen establecidos controles para tratar de normalizar la situación, que sobre las siete de la tarde era totalmente caótica.
Las retenciones de vehículos han provocado que la Benemérita haya realizado un despliegue de los GRS, que portaban material antidisturbio como medida disuasoria.
El tráfico por las barriadas de Miramar Bajo y Juan XXIII es muy denso y lento, mientras que en la zona del Chorrillo se estaba habilitando un área de embolsamiento de vehículos para tratar de descongestionar el tráfico
