Opinión

Cuenta atrás para la gran coalición

El rey Felipe VI ha convocado para hoy y mañana a los líderes políticos españoles con representación parlamentaria con la intención de verificar si puede proponer un candidato a la Presidencia del Gobierno o proceder a la disolución del Parlamento para la convocatoria de nuevas elecciones en junio tal y como establece nuestra Constitución.

El rey Felipe VI ha convocado para hoy y mañana a los líderes políticos españoles con representación parlamentaria con la intención de verificar si puede proponer un candidato a la Presidencia del Gobierno o proceder a la disolución del Parlamento para la convocatoria de nuevas elecciones en junio tal y como establece nuestra Constitución. Si España no cuenta con un nuevo Gobierno antes del 2 de mayo, al día siguiente se publicará el decreto de convocatoria de elecciones legislativas para el 26 de junio. Por tanto, esta ronda debe ser aprovechada como la última oportunidad de dar sentido a la XI legislatura de la democracia española.

Los españoles y las españolas somos plenamente conscientes que se han dicho muchas cosas desde el 20D. Tras cientos de declaraciones altisonantes, reuniones con partidos de toda índole, acuerdos de Comités y referendos a las bases, encuentros públicos o privados con dirigentes europeos, responsables autonómicos y visitas a asociaciones y representantes de la sociedad civil ha llegado el momento de la verdad. Ha llegado el momento de asumir la responsabilidad primera de un dirigente político serio, de un dirigente político responsables, de un dirigente político con sentido de Estado: conformar un Gobierno viable para España.

El verdadero cambio de cultura democrática que los españoles expresaron en las urnas en las pasadas elecciones, es abandonar las posiciones propias y buscar el acuerdo mirando el interés general. Desde el primer momento, el Partido Popular  ha ofrecido, tanto al Partido Socialista como a Ciudadanos, la posibilidad de conformar un Gobierno constitucionalista centrado en los grandes retos a los que se enfrenta nuestro país. La única opción moderada, centrista y europea, constituida por las grandes formaciones constitucionalistas frente a la opción radical de un PSOE entregado a Podemos y a los independentistas. En definitiva, hemos comenzado la cuenta atrás para la gran coalición.