Alí Ouattara se convirtió en uno de los personajes principales de una historia que en mayo de 2015 conmocionó a la opinión pública nacional. Su pequeño hijo Adou fue hallado por la Guardia Civil en el interior de una maleta durante una inspección rutinaria en la frontera de El Tarajal. Una joven marroquí trataba de introducir al niño ilegalmente en España utilizando un ardid poco usual.
El padre de Adou era juzgado el día 20 en la Audiencia Provincial. Ouattara se enfrentaba a una pena de tres años de prisión por su participación en el intento de introducir a su hijo en el país.
La Fiscalía solicitaba un duro castigo para este padre costamarfileño que permaneció 33 días en prisión preventiva tras su detención. La calificación del Ministerio Público subrayaba: “como consecuencia de la forma de ocultación (en una maleta muy pequeña, sin ventilación, con riesgo evidente de asfixia y estanco el menor aglutinado de forma inhumana) se puso en serio peligro la vida del inmigrante”.
El día del juicio, decenas de medios de comunicación, muchos de ellos nacionales, permanecían a las puertas de la Audiencia para dar cuenta de la vista.
Outtara narró ante el tribunal su peripecia familiar. En 2014, vivía en la localidad canaria de Puerto del Rosario donde, tras varios años de lucha contra la burocracia, había conseguido traer desde su país a su esposa Lucie y a una hija. Adou residía con un hermano de 18 años y su abuela paterna en Costa de Marfil. La muerte de la anciana precipitó la decisión de la familia de hacer viajar al más pequeño de sus hijos a España ante la negativa de la Administración a aprobar la solicitud de reagrupación familiar tramitada por el padre.
La familia consiguió entrar en contacto con un camerunés que, a cambio de 5.000 euros, se comprometió a traer al niño legalmente a España. Ouattara defendió durante la vista que siempre creyó que la entrada de Adou en Ceuta se haría dentro de la legalidad y que nunca fue informado de que el pequeño sería introducido en una maleta para burlar los controles policiales.
Adou declara ante el tribunal (C.A./ARCHIVO)
Finalmente, la Audiencia Provincial imponía al acusado una condena de 3 meses y 22 días de multa a razón de dos euros por día por la comisión de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
La causa continúa abierta para Fátima E.J., la marroquí de 22 años detenida como la persona que portaba la maleta en la que se escondió a Adou. La mujer se encuentra en paradero desconocido.
Falsificación de contratos de trabajo
Una de las operaciones policiales más relevantes del año permitió la detención de 21 personas acusadas de participar en una red dedicada a la falsificación de contratos de trabajo. Con este documento, los “clientes” de la organización conseguían darse de alta en la Seguridad Social y, con ello, satisfacer pretensiones como la renovación del permiso de residencia o la reclamación de algún tipo de prestación económica a la Administración.
El grupo estaba integrado por cinco individuos, cuatro de ellos propietarios de una gestoría. La quinta persona arrestada era una persona autorizada para acceder al sistema de red en el que se gestionan los contratos. Todos ellos fueron acusados de la presunta comisión de delitos contra la Seguridad Social, falsedad en documento público y asociación ilícita.
Sede de la Seguridad Social (C.A./ARCHIVO)
También resultaron detenidos los propietarios de las cuatro empresas ceutíes cuyos nombres figuraban en los contratos y las personas que hicieron uso de los mismos, acusadas de los mismos delitos que los anteriores.
La investigación, promovida por la Policía Nacional, contó con la participación de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Ceuta, la Dirección Provincial de la Tesorería de la Seguridad Social, la Dirección Provincial del Servicio Público de Empleo Estatal (S.E.P.E.) y la Oficina Única de Extranjeros de Ceuta.
Cae una banda internacional de narcos
En un año marcado por los golpes que las fuerzas de seguridad del Estado han infligido a las mafias del narcotráfico en el Estrecho, Ceuta no permaneció ajena a este combate.
A mediados de mes, la Policía Nacional conseguía desarticular una banda dedicada al transporte de grandes alijos de hachís hacia la Península. La operación permitió la incautación de casi 1.300 y la detención de 17 miembros de la organización, una trama con una sólida implantación internacional.
Las detenciones fueron el resultado de un año de trabajo que arrancaron con el descubrimiento de distintos emplazamientos en la ciudad dedicados al almacenaje de droga, entre ellos una vivienda en Casas Nuevas, en la barriada El Príncipe, en torno a la cual los investigadores un intenso movimiento de personas y vehículos.
La droga, que llegaba a la ciudad procedente de Marruecos y cargada en vehículos dotados de dobles fondos, se trasladaba en un primer momento hasta un garaje situado en la avenida Virgen de África para, posteriormente, ser depositada en una nave industrial en El Tarajal. Para no levantar sospechas durante el traslado, el automóvil que transportaba el hachís disimulaba en su caja de carga la droga como una mercancía con las que a diario se comercia en el polígono empresarial.
También fue noticia
La situación de la frontera volvía a poner sobre el tapete el debate en torno a la conveniencia de que Ceuta pudiera ser integrada en la Unión Aduanera. El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, proponía un plan para sondear la viabilidad de la entrada de la ciudad en esta área de libre comercio El planteamiento del Gobierno fue acogido con distanciamiento y prevención por la mayoría de las fuerzas de la oposición, excepción hecha de Caballas.
Días más tarde, Vivas se reunía con su homólogo melillense, encuentro del que surgiría una posición conjunta: la integración será deseable siempre y cuando se respetase los regímenes económico y fiscal de ambas ciudades autónomas. El debate languideció con los meses hasta abandonarse.
Acuartelamiento donde apareció el cadáver del soldado (C.A./ARCHIVO)
El capítulo de sucesos resultó denso durante el mes de febrero. Un legionario del Tercio Duque de Alba aparecía muerto de un disparo en su cuartel. Junto al cuerpo se halló su arma reglamentaria.
Días más tarde, un individuo protagonizaba un intercambio de disparos con la Policía en Algeciras. El sujeto, que logró huir, tenía una orden de detención dictada por un juzgado de menores de Ceuta.
La comunidad educativa se movilizó a comienzos de mes tras la agresión sufrida por una profesora del instituto Abyla a manos de uno de sus alumnos de 2º de ESO. El adolescente golpeó a la docente en la cabeza con un objeto metálico.
Inicio de las obras de la Gran Vía (C.A./ARCHIVO)
El día 26 daban comienzo las obras de remodelación de la Gran Vía y su entorno, un proyecto en torno al cual el Gobierno local y los partidos de la oposición vienen manteniendo una intensa polémica. La obra cuenta con un presupuesto de 7,8 millones de euros y estará concluida, según las estimaciones de la Consejería de Fomento, en marzo próximo.
