El todavía presidente, en una carta abierta, manifiesta que “a partir de ahora entramos en una nueva etapa donde debemos decidir si el proyecto continúa o se extingue”
Raggio reconoce que han sido unos años fantásticos, “en los que he podido compartir con personas increíbles y brillantes. Ha extendido su agradecimiento a sus colaboradores, a los embajadores de Salazones de Ceuta que en la distancia habéis divulgado nuestra cultura salazonera, a los patrocinadores privados y públicos, a los medios de comunicación y a todos los amantes de los salazones de Ceuta, de aquí y de afuera.
Para el mandatario ha sido un orgullo, como ceutí, reivindicar los salazones de Ceuta como nuestro patrimonio cultural, natural y artístico. “Ahora os toca a vosotros coger el relevo, o lo apoyamos o lo dejamos morir lentamente”.
“Soy consciente que como presidente del proyecto me he creado muchos enemigos, gracias a vosotros soy más grande, tengo más experiencia y tengo más proyectos de futuro...un millón de gracias por vuestras críticas me habéis enseñado a volar y eso no lo sabe hacer todo el mundo”. “A los que me habéis apoyado y habéis creído en mí y mis ideas locas...os pido perdón por no haber conseguido todos los objetivos que nos marcamos.
La misiva concluye con que “ha llegado la hora de la reflexión profunda de que queremos ser como pueblo....yo lo tengo claro y no es lo que sale en los medios de comunicación a diario. Ceuta es mucho más que una frontera y un barco. Ceuta no es crítica hacia la gente que sueña y crea proyectos de vida. Ceuta es mucho más que eso.
