la realidad de una de las barriadas más antiguas

Benzú, la eterna olvidada

Asociaciones, partidos políticos y los propios vecinos no cesan de transmitir quejas que, en definitiva, conducen a los mismos calificativos: dejadez y abandono de Benzú por parte del Gobierno. Ceuta Actualidad ha recorrido junto a Ahmed Ahmed, vicepresidente de la Plataforma en Defensa de la barriada, todos los rincones de esta zona privilegiada de Ceuta y ha podido extraer sus propias conclusiones. 

Benzú, ubicada en una zona privilegiada de Ceuta, con la Mujer Muerta a sus espaldas, bañada por el Océano Atlántico y lindando con el pequeño pueblo marroquí de Beliones, es una barriada que ha cambiado mucho con el paso de los años.

Asociaciones, partidos políticos y los propios vecinos no cesan de transmitir quejas que, en definitiva, conducen a los mismos calificativos: dejadez y abandono por parte del Gobierno. 

Ceuta Actualidad se ha desplazado hasta Benzú para conocer cuál es la realidad actual de la zona. De la mano de Ahmed Ahmed, vicepresidente de la Plataforma en Defensa de la barriada, este periódico digital ha recorrido todos los rincones y ha tenido la posibilidad de conocer la versión de los vecinos.

Hace algunos meses, la Ciudad anunciaba un plan de actuaciones que incluía adecentar el pavimento, mejorar el alumbrado y la limpieza de la barriada. Ahmed asegura que poco o nada se ha hecho al respecto. Paseando por las calles se puede observar que muy pocos tramos están asfaltados y el estado de las carreteras es pésimo. En cuanto a la limpieza, el vicepresidente de la Plataforma en Defensa de Benzú lamenta que "los vehículos del servicio de limpieza duerman en esa barriada pero no actúen en la misma".

Otra de las promesas lanzadas por el Ejecutivo tiene que ver con la construcción de un edificio polifuncional que albergue la Unidad de Trabajo Social. De momento, la barriada no cuenta con esa infraestructura y "los trabajadores sociales tienen que desempeñar su trabajo en un contenedor aguantando unas condiciones laborales infrahumanas que terminan padeciendo las personas que hacen uso de estos servicios", expone Ahmed.

 

Paro, vivienda y zonas de ocio

El principal problema que padecen los vecinos de este barrio es el desempleo al que se le une muy de cerca el de la vivienda. Para Ahmed, Benzú es una zona con gran potencial turístico, pero son pocas las personas que deciden apostar por esta barriada para implantar sus negocios. "La actividad comercial se ha visto mermada con el paso de los años, ya a penas quedan comercios abiertos". Ahmed hace referencia al mítico cafetín de Benzú que está a punto de cerrar sus puertas.

Uno de los logros estrella, y de lo que se congratulan los vecinos, es poder contar con un consultorio médico en la barriada. Esto posibilita a los residentes no tener que desplazarse hasta Otero. "Vivimos más tranquilos y seguros".

En cuanto a los jóvenes de la barriada, fueron muchos los que se dirigieron a este medio para pedir más zonas de ocio. "Benzú cuenta con un polideportivo en muy malas condiciones y un pequeño parque infantil abandonado completamente", asegura Ahmed. Escasez de actividades extraescolares para los niños es otra asignatura pendiente. 

 

Playas y perímetro fronterizo

Pasear por las playas de esta zona de la ciudad es prácticamente imposible. Este verano el levante ha depositado en la orilla toneladas de limo que impiden el baño de las personas que desean disfrutar de la Bahía Norte. La Ciudad ha anunciado la limpieza del litoral pero, de momento, a Benzú no ha llegado. Los vecinos se quejan del mal olor y de la plaga de insectos que estas plantas producen después de semanas sobre la arena. 

Cerca de la barriada, el perímetro fronterizo. Todos los vecinos coinciden en que la propuesta de Caballas de abrir el paso de Benzú a los residentes que deseen acceder a Marruecos podría beneficiar a la barriada. "Sería positivo para los negocios y obligaría al Gobierno a adecentar esta zona", dice Ahmed. 

Después de pasar horas paseando por la barriada e intentando conocer su realidad, sólo podemos resumir este recorrido en una frase: Benzú, la eterna olvidada.