Hace algunos años era difícil pensar que se pudieran comercializar las semillas de cannabis sin ser penalizados por la ley, sin embargo, los nuevos estatutos han permitido dilucidar una serie de normativas que van en pro de preservar la especie y evitar su tráfico y comercialización ilícita, es aquí donde los bancos de semillas juegan un papel importante. Esto se debe a que permiten la preservación de las especies de estos productos que también tienen muchos beneficios. Ahora bien, el valor de las semillas de cannabis no solo es visto por los cultivadores experimentados y novatos, pues en la actualidad, este tipo de productos goza de gran aceptación en la sociedad gracias a sus características muy peculiares que alientan a muchos a levantar cultivos o coleccionar de forma profesional estas variedades de especies.
Características peculiares de las semillas de cannabis
Las semillas de cannabis no son como cualquier otra semilla de plantas, incluso algunas requieren de condiciones donde se deben manipular la humedad o la luz para que tengan un óptimo crecimiento, sin embargo, estas semillas poseen características distintivas que, sin duda, avivan aún más la curiosidad por conocer más sobre su desarrollo. Algunas de los datos claves más relevantes son los siguientes:
Son coleccionables
Para los detractores del cannabis es una noticia que podría derribar el tabú que se ha mantenido por años, y es que, la planta no es sinónimo exclusivo de tráfico de drogas, por el contrario, han surgido una serie de actividades en torno a ella que cuentan con aprobación legal, una de ellas es la colección de semillas de cannabis. Esta tarea es muy conocida en ciertos países donde carece de penalización, sin embargo los cultivos clandestinos y posterior tráfico si van a parar a manos de la justicia. La intención de los cultivadores es preservar las especies en condiciones óptimas dando chance a que el panorama legal cambie y puedan ser cultivadas libremente, mientras tanto, como objeto de colección van muy bien.
No dependen de su tamaño
No hay una relación directa entre el tamaño de las semillas de cannabis y la proporción del tamaño de la planta que vaya a surgir a partir de ellas. Por lo general, tienen la forma de la cabeza de una cerilla, sin embargo, este no es un rasgo distintivo, pues cada especie presenta una variación de tamaño que no supera el de un guisante pequeño.
Una planta, cientos de semillas
Esto es algo sorprendente de lo cual sólo la naturaleza es la responsable, y es que, se ha determinado que una sola planta de cannabis puede dar paso a cientos o miles de semillas, esta virtud ha sido de gran provecho para los cultivos que son destinados a servir como fuente de alimento, sin duda es una gran ventaja en la cantidad de productos que se obtiene a partir de una sola planta.
Pueden ser comestibles
La gastronomía y las ciencias culinarias han aprovechado el valor nutricional de las semillas de cannabis para incorporarlas a preparaciones sorprendentes, pues son fuente natural de proteínas y ácidos grasos indispensables para cumplir diversas funciones metabólicas.
Germinación accidental
Las semillas de la planta del cannabis son tan nobles que pueden germinar de forma accidental. Esto para muchos pudiera ser una gran ventaja a nivel de cultivos, pero los que se apegan a las leyes saben que podría ser motivo de penalizaciones, incluso, a los coleccionistas más experimentados tampoco les agrada la idea de que su preciada colección germine de un momento a otro, por eso hay que tener mucho cuidado y precaución con la conservación de estas semillas.
Son atractivas para los animales
Aunque parece mentira, los animales también pueden sentir atracción por las semillas de cannabis, incluso podrían disfrutar de todos sus beneficios nutricionales al igual que los humanos. Las semillas de cannabis son de provecho para las mascotas como los perros o para las aves, solo debes mezclarlas con su comida habitual o complacer a diversos animales silvestres colocando pequeños comederos en el exterior de tu hogar.
Sexado de las semillas
Para los que no están familiarizados con el tema, es preciso aclarar que las plantas de cannabis se clasifican por género y éste se evidencia cuando la planta comienza a crecer, es decir, a partir de una semilla, es prácticamente imposible saber el género de la futura planta, incluso, existen ciertas condiciones ambientales que pueden impactar sobre la planta haciendo que produzcas tanto flores masculinas como femeninas de modo simultáneo. Caso similar ocurre con la calidad de las semillas, pues esta deriva de la genética como tal y es imposible dilucidar la genética con tan solo ver una semilla, además, para potenciar las características genéticas de una semilla y lograr que se expresen de forma favorable, es necesario cuidar las condiciones que giran en torno a su cultivo.
