A día de hoy, no existe ninguna certeza de que los actos festivos y religiosos programados en la ciudad durante el verano puedan celebrarse este año o hacerlo sin condicionamientos. El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha insistido hoy en que cualquier celebración que implique una concentración numerosa de personas quedará supeditada a consideraciones de salud pública. “La salud de los ceutíes estará por encima de cualquier cosa”, ha anunciado.
Por lo pronto, en atención a su condición de grupo de riesgo ante el coronavirus, el Gobierno local ha decidido la suspensión de la práctica totalidad de las actividades organizadas para los mayores desde ahora y hasta final de año.
Vivas ha explicado que, a la espera de conocer la evolución de la pandemia y las futuras medidas que pueda adoptar el Gobierno de España para contener el avance de la enfermedad, la Ciudad mantiene vivos los contratos y programación de las principales citas veraniegas. Sin embargo, ello no significa que, finalmente, no sea necesario decidir su suspensión. “A día de hoy, no estoy en condiciones de asegurar que, por ejemplo, la Feria vaya a celebrarse”, ha advertido.
La Feria, el Corpus, la Virgen del Carmen, el Ramadán o San Juan son algunas de las citas que se verán afectadas por la crisis de salud pública que asuela el país. La cercanía del Ramadán hará que, prácticamente sin duda, y en palabras del propio Vivas, la celebración se vea “absolutamente condicionada”.
En cuanto a la temporada de playas, el presidente ha explicado que los contratos de mantenimiento y servicios en los arenales de la Ciudad están activos a la espera de conocer el desarrollo de los acontecimientos.
