La comisión que debería tratar el plan de reconstrucción de la economía ceutí tras la crisis del coronavirus ha celebrado hoy su primera sesión con la ausencia crítica de los sindicatos CCOO y UGT y la crítica del PSOE, primer partido de la oposición municipal.
El Gobierno local conseguía sentar en una misma mesa a los grupos de la Asamblea, el sindicato CSIF, la Cámara de Comercio, la Confederación de Empresarios (CECE) y la Delegación del Gobierno, apoyados por los técnicos de la sociedad municipal Procesa y de los Servicios Tributarios de la Ciudad. El objetivo confesado por los convocantes de la cita es el de trazar lo que ha denominado “Plan por un futuro más sólido y estable para Ceuta”, un instrumento basado en un documento previo con 140 medidas elaborado unilateralmente por Gobierno local y presentado públicamente el pasado mes de febrero.
CCOO y UGT han decidido no asistir a la reunión por considerar que no se ha tenido en cuenta a ninguna de las dos centrales sindicales ni en la elaboración del documento inicial ni en las aportaciones que posteriormente remitieron a la consideración del Gobierno de la Ciudad. “Usted considera que las organizacions que representan a los trabajadores no merecen ser tnidas en cuenta”, protestan los sindicalistas en una carta dirigida personalmente al presidente de la Ciudad, Juan Vivas.
Esta situación constituye, a juicio de CCOO y UGT, una “burla” si se atiende a las apelaciones a la unidad lanzadas por el Gobierno local ante el reto de la crisis económica que se cierne sobre Ceuta. “Se nos invita a participar en una comisión técnica sin que haya existido previamente un debate sobre la estrategia que se pretende seguir, los objetivos perseguidos, los métodos, los procedimientos, los plazos…”, censuran los sindicatos en su carta.
Un documento “improvisado”
El diputado por el PSOE, Manuel Hernández, también ha mantenido un tono crítico hacia la propuesta presentada por el Gobierno, al que reprocha haber puesto sobre la mesa un documento que, según sostiene, plantea medidas cuyas consecuencias han de ser objeto de un mayor estudio. Hernández se refiere a la propuestas de acabar con la excepción al Tratado de Schengen, que permite a los residentes en la región marroquí vecina entrar en Ceuta sin necesidad de visado, y de procurar el ingreso de la ciudad en la Unión Aduanera. “Una modificación de este carácter tendría consecuencias en la estructura económica de la ciudad y modificaría su situación fiscal”, ha advertido el socialista.
Hernández ha calificado el documento del Gobierno de “improvisado” y le ha achacado la ausencia de un programa respaldado con partidas económicas que lo sustenten.
Por otro lado, los dos diputados a la Asamblea no adscritos, José María Rodríguez y María del Carmen Vázquez, han expresado su protesta por no haber sido convocados a la reunión.
Los miembros de la comisión han sido convocados a una nueva reunión todavía sin fecha.
