La movilidad ha sido desde el inicio de la pandemia una de las principales causas de la propagación de los contagios. Así, el puente de diciembre se terciaba crítico para Ceuta que apenas unas semanas antes había entrado oficialmente en la sexta onda epidémica. Los dos tercios de ceutíes que decidieron disfrutar de unos días de descanso y asueto regresaron acompañados con una gran carga en la incidencia que ha reflejado sus resultados en esta semana que acaba de finalizar. Tal y como predijo el jefe del Servicio de Medicina Preventiva, Julián Domínguez, el efecto pospuente se apreciaría a partir del lunes 13, y que ha dejado en tal solo siete días 477 contagios, más de la mitad del total acumulado desde que se decretó la sexta ola, que asciende a 857. Mientras, el grueso de personas en aislamiento ya supera el millar.
Ha sido una semana de récords. En incidencia, que ya se sitúa por encima de los 700 casos por 100.000 habitantes, y en número de contagios diarios. El primero llegó el martes, 72 casos- la cifra más elevada de toda la pandemia-, que sería desbancada tan solo un día más tarde cuando se registraban 98 positivos. Cerca del centenar también se ubicó la jornada del jueves, mientras que las restantes no han bajado de los 40.
La entrada en juego de la ómicron ha sido una de las principales causas en el acelerón de los contagios. Variante menos letal que la delta, pero con una transmisibilidad más elevada, han apuntado los últimos estudios, y que ha desbocado la situación epidemiológica en la ciudad donde, según las previsiones de las instituciones sanitarias, todavía no ha llegado lo peor. Así lo avisaba el viernes el propio Domínguez, esta semana que entra, en las que arrancarán las fiestas navideñas, va a ser crítica. También lo apunta el Sistema Estatal de Registro de Laboratorios que pronostica unas tasas superiores a 1.000 x 100.000, además de situar en Ceuta el número reproductivo más elevado de España (2,39).
Mientras tanto, el Gobierno se esfuerza por excusar, bajo el paraguas de la “leve presión hospitalaria”, su inmovilidad ante tal descontrol, en cuyo posible aumento de la incidencia ha delegado la toma de medidas más restrictivas. De esta forma, intenta capear el temporal afanado en la vacunación de los menores, la revacunación, e intentar captar a los negacionistas como instrumento infalible para salir airosos del negro panorama que se avecina o, al menos, para salvar la campaña de Navidad.
El pasaporte covid ha sido la última y única medida adoptada para no reventar las fiestas. Sin embargo, la estrategia adoptada tanto por Ceuta como por el resto de las autonomías verse sacudida esta semana, el miércoles concretamente, cuando Sánchez ha convocado de urgencia una Conferencia de presidentes ante la preocupación por el avance de esta onda epidémica.
El propio jefe del Ejecutivo reconocía en su comparecencia de ayer el “riesgo cierto y real” por el auge de contagios, a la vez que emplazaba a las autonomías a “evaluar” nuevas medidas. Con ello, insistía en que se intensifique a respuesta de la Administración ante la expansión del virus. La cumbre será telemática y Sánchez la presidirá desde el Senado, tan solo dos días antes de la Nochebuena.
