¿La situación epidemiológica de Europa puede soportar sin riesgo el tránsito de más de 3 millones de personas a través de España? De la respuesta a esta pregunta depende que la Operación Paso del Estrecho se active este verano tal y como lo viene haciendo desde hace tres décadas.
Aunque hasta la fecha no ha habido un pronunciamiento oficial al respecto, las posibilidades de que se dé luz verde al dispositivo extraordinario que permite a cientos de miles de marroquíes volver a su tierra cada verano parecen, a día de hoy, escasas. A poco más de dos semanas del 15 de junio, fecha que cada año marca el inicio del Paso del Estrecho, las comunicaciones marítimas con Ceuta y Tánger se encuentran rigurosamente restringidas. Al tiempo, la frontera de El Tarajal sigue cerrada.
La idea de que Ceuta se convierta en una de las pasarelas de paso de miles de vehículos de turistas marroquíes camino de su país no resulta, precisamente, del agrado del Gobierno municipal. “El principal factor de protección de Ceuta en esta crisis ha sido nuestro aislamiento geográfico y de comunicaciones”, no se ha cansado de recordar el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, cada vez que ha sido interpelado acerca de la conveniencia de activar el Paso del Estrecho.
Con todo, la disposición que parecen mantener los gobiernos español y marroquí para mantener clausuradas sus fronteras no parece dar mucho aliento a la idea de que este año el dispositivo pueda organizarse.
La incidencia de la pandemia de coronavirus en los países de origen de los marroquíes que cada año atraviesan Europa con destino a su país da una idea de las dificultades que tendrían las autoridades para justificar la organización del dispositivo este año. Los viajeros procedentes de Francia o Italia saldrían de países donde el número de infectados alcanza, respectivamente, los 182.709 y los 229.858. Y lo harían para cruzar por España, un territorio que suma a 235.772.
Con todo, las autoridades españolas todavía no se han pronunciado y el puerto de Algeciras, nudo clave en el Paso del Estrecho, espera a recibir instrucciones.
