El polideportivo acoge a día de hoy a 139 extranjeros sin techo

La Delegación del Gobierno rechaza la petición de la Ciudad de que los militares vigilen La Libertad

El Gobierno municipal insiste una vez más en que sea la Delegación la que asuma la seguridad en el pabellón, convertido en albergue provisional para más de 130 migrantes y transfronterizos marroquíes. 

Coche patrulla de la Policía Local, estacionado a las puertas del pabellón La Libertad (C.A.)
photo_camera Coche patrulla de la Policía Local, estacionado a las puertas del pabellón La Libertad (C.A.)

El portavoz del Gobierno municipal, Alberto Gaitán, ha revelado que la Delegación del Gobierno se negó ayer a encomendar al ejército la labor de vigilar el pabellón La Libertad, habilitado como albergue provisional de migrantes y trabajadores transfronterizos marroquíes. La petición había sido planteada por la Ciudad en el transcurso de la videoconferencia diaria que sus representantes mantienen con los de la Administración General del Estado.

El Gobierno viene insistiendo desde hace días en que la competencia sobre la seguridad de esta instalaciones cabe a la Administración General de Estado. La Ciudad encomendó el martes en exclusiva a los policías locales las tareas de vigilancia del polideportivo después de que la empresa de seguridad que les apoyaba dejara de desempeñar esta labor.

Los representantes sindicales de los policías criticaron la decisión de la Ciudad de obligar a los agentes a prestar servicio en el interior del pabellón. Precisamente, el día en el que les fue transmitida la orden, una treintena de las personas acogidas en las instalaciones se dio a la fuga. Anoche, los policías volvieron a contar con el refuerzo de la seguridad privada.

“Creemos que es una competencia de la Delegación porque estamos hablado de inmigración y porque dada la situación han de ser los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado los que se han de hacer cargo”, ha reclamado Gaitán.