Se dispara la inmunidad, entre avalancha de contagios y terceras dosis, para afrontar “lo nunca visto”

El SERLAB pronostica una letalidad diaria en Ceuta entre el lunes y el viernes de esta semana

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photo_camera La pasada semana finalizó con un total de 1505 ceutíes contagiados. Una tendencia que va a continuar, como mínimo, hasta mitad de mes. (C.A/ARCHIV)

Ni es menos leve, ni menos letal, intenta dejar claro con contundencia el jefe del servicio de Medicina Preventiva del HUCE respecto a esta sexta ola a la que se le ha restado importancia. “Es cierto, las vacunas están haciendo su función. Si esto nos hubiese pasado en las primeras ondas epidémicas sería una masacre, pero no es mejor esta que las anteriores”, aclara Julián Domínguez, que predice un aumento de la mortalidad si la cifra de contagios continúa en la senda que adoptó hace un mes. Es decir, en un aumento vertiginoso que impide hacer estimaciones a medio plazo sobre la deseada estabilización de la curva.

Un techo de curva “imprevisible” porque el escenario que se proyecta “es el nunca visto”. Para el epidemiólogo, el ascenso es tan vertical que de seguir en esta línea “podemos superar en número de ingresos y fallecidos al de las peores ondas cuando la población no estaba vacunada”. Una coyuntura que ha recogido los últimos días el informe diario que reporta su servicio, en el que quedaba plasmada la previsión del Sistema Estatal de Resultados de Laboratorios (SERLAB) para Ceuta, a la que sitúa en un horizonte temporal de entre cinco a quince días con una elevación de la incidencia de alrededor de 2.700 por cien mil y una ocupación hospitalaria de hasta 19 camas.

“En UCI de hasta 8-9 camas ocupadas por covid, y uno de los modelos arroja la cifra de ocupación de 15 camas de UCI”, añadía dicho informe. Asimismo, destacaba que la letalidad predicha por el modelo será diaria entre los días 10 y 15 de enero, es decir, entre el lunes y el viernes de la próxima semana.  Todo ello, si el flujo descontrolado de casos no se ataja.

Un caos de contagios provocado por ómicron que apretará el sistema sanitario, como ya se empieza a notar. Pero, pasado el golpe, la inmunidad alcanzada por buena parte de la población después de haber superado la infección o gracias a la tercera dosis augura un futuro más esperanzador. Y, aunque ya son pocos los que aspiran a alcanzar la anhelada inmunidad de grupo con un virus que no deja de dar sorpresas, muchos sí auguran un escenario con menos infecciones y casos más leves, salvo para los grupos de más riesgo y aquellos que sigan sin vacunarse.

El sector de la epidemiología considera que el impacto de esta ola “sumado al avance de la dosis de recuerdo” tendrá una importante repercusión en la inmunidad de la población. Sobre todo, si se tiene en cuenta que “buena parte” de los contagios se están produciendo en personas que todavía no habían completado o iniciado las pautas recomendadas.

Según los últimos datos facilitados por Medicina Preventiva, 3518 personas se han contagiado en Ceuta desde el inicio de la sexta ola (declarada oficialmente el 10 de noviembre), un tercio de ellos en la última semana (1505). Una tendencia al alza de la que se espera siga bastantes días más por encima del centenar de casos diarios. A la inmunidad desarrollada de forma natural hay que sumar la lograda gracias a las dosis de recuerdo que ya han recibido 17.734 ceutíes de entre 40 y 59 años, es decir, un 28%. Unos datos que no son considerados malos y que, según el consejero de Sanidad, Alberto Gaitán, se encuentran en la línea de la media nacional

La importancia del tercer pinchazo radica en que los estudios realizados hasta la fecha muestran que la protección ofrecida por las dos primeras dosis de las vacunas de ARN mensajero (la de Pfizer-BioNTech y la de Moderna) empieza a descender a partir del cuarto mes, antes en las que utilizan un vector adenoviral (Astrazenca y Janssen).

Ceuta puede presumir de registrar un éxito rotundo en la respuesta a las jornadas de puertas abiertas para la vacunación sin cita. La prueba piloto implantada el pasado fin de semana registró colas nuca vistas que se postraban casi a la altura del Poblado Marinero. Empujado por este furor colectivo a la inmunización, Sanidad amplió la vacunación sin cita hasta mitad de la semana que acaba de finalizar. En total, más de 2400 personas- entre dosis de recuerdo, vacunación infantil y rezagados en la inmunización-, pasaron por el punto instalado en el Palacio Autonómico.

Más ralentizada va la vacunación infantil, iniciada el pasado 15 de diciembre, que ha sido la última baza para poner coto a la pandemia. Tan solo 2538 menores de entre 5 y 11 años- de los 8544 a vacunar- ya han recibido la primera dosis. Cifra que se traduce en un 26% y que a ojos de Domínguez “es muy baja”. En su opinión, habría que “apretar más” e implementar otras estrategias, como la inoculación en centros educativos que su propio servicio propuso, y que la Consejería que dirige Gaitán rechazó.

Los niños que se contagien ahora y no hayan recibido ninguna dosis completarán la pauta con un solo pinchazo a las cuatro semanas del diagnóstico de la infección o inicio de los síntomas. Aquellos que hayan recibido uno deberán esperar ese mismo plazo de tiempo para la segunda dosis, manteniendo cuando sea posible el intervalo de ocho semanas entre los dos pinchazos.