No se podrá beber de pie, todos estarán sentados en grupos de cuatro, ha asegurado Guerrero

Los bares tendrán que cerrar a las 6 de la tarde el 24 y 31: se prepara un gran despliegue policial

El toque de queda seguirá siendo a la 1.30 horas y el esfuerzo policial será importante sobre todo en los denominados puntos calientes y a partir de las seis de la tarde. Las reservas para cenar el fin de año no se anularán si le evolución de la pandemia es buena. 

Los hosteleros tendrán que cerrar a las seis de la tarde, por decreto de la Ciudad, los días 24 y 31 de diciembre. Según la evolución de la pandemia, el 31 se volvería a abrir la hostelería (pero no los bares) para los que tienen reservada alguna cena de fin de año. 

El mensaje de Javier Guerrero a los hosteleros y a la Cámara de Comercio ha sido que "estoy viendo que se están relajando las medidas y que se están produciendo en las cafeterías y terrazas reuniones de más de cinco y seis personas, y esto se está permitiendo por parte de los responsables de los establecimientos". El consejero ha pedido que esto no se permita. No más de cuatro personas, esa es la norma, ha insistido. 

Sólo sentados

No se van a permitir escenarios y barras ni beber de pie (todos sentados en grupos de cuatro) ni agrupaciones ha avanzado el consejero. "Las cosas siempre pueden cambiar dependiendo de la evolución de la pandemia", ha recordado. 

Guerrero sabe que hay puntos calientes como la plaza del Teniente Ruiz y la de Correos, pero se controlarán. "Evitaremos todas las aglomeraciones que se puedan dar, las plazas tienen un aforo y la gente tendrá que estar sentada, no hay barras ni escenarios. Los que no puedan sentarse saldrán del lugar o se les multará". 

Se podrá ampliar el número de mesas en las terrazas según lo permita el aforo para el cumplimiento de las medidas de seguridad. Habrá que valorar cada situación, ha señalado el consejero. 

El comercio minorista no pondrá vender alcohol esos días, sobre todo a menores.

El despliegue policial será importante en los puntos calientes y sobre todo después de las seis de la tarde para controlar los posibles botellones. "La Ciudad hará un esfuerzo grande en este sentido", ha afirmado Guerrero. 

El toque de queda se mantendrá a la una y media de la madrugada para que dé tiempo a regresar a casa después de la cena familiar.