Los marroquíes continuarán confinados hasta el 20 de mayo. Rabat ha adoptado hoy esta decisión, que prorroga el aislamiento domiciliario que se inició el pasado 20 de marzo y obligará a los musulmanes del país vecino a celebrar el mes de Ramadán en sus casas.
El final del Ramadán podría celebrarse una vez terminado el confinamiento, siempre y cuando las autoridades no decidieran establecer una nueva prórroga.
El Gobierno marroquí ha establecido estrictas reglas de confinamiento y fijado sanciones por salir a la calle sin mascarilla que, incluso, pueden suponer el ingreso en prisión.
Hasta hoy, el país vecino ha registrado 2.670 contagios. El número de fallecidos se eleva a 137.