El 4 de mayo abrieron los que ya estaban haciéndolo antes con el permiso del Gobierno, pero muy pocos más. La mayoría de las persianas de los comercios minoristas continuaron echadas. La fase 0 de la desescalada es un fiasco para la remontada de la economía ceutí. No así para las personas que con fluidez pasean o hacen deporte en nuestras calles. Un respiro que, desde luego, necesitaban.
Eso de que el Gobierno de la Nación permita abrir a los propietarios de locales y establecimientos, menores de 400 metros cuadrados de superficie, con cita previa y atención individualizada no parece una brillante idea. ¿Qué ingresos podrían tener al día? Más bien serían pérdidas y más pérdidas aún si ponen a trabajar a alguno de sus empleados. Sí que abrieron determinados servicios más familiarizados con la "cita previa" como las peluquerías y otros de naturaleza similar.
La apertura de bares y restaurantes para hacer entregas de comidas para llevar parece que tampoco iba a funcionar por las mismas razones. Conclusión: este lunes levantaron la persiana aquellos a los que ya se les estaba permitido.
La fase 0, en la que a lo mejor no tendriamos que estar ya, es un auténtico fiasco de cara a la reactivación económica. Difícilmente un autónomo vuelve a la acción con tantas dudas y medidas de seguridad que para ellos sí que impone el Ministerio de Sanidad. La calle es otra historia.
El equipo de trabajo de la Consejería de Sanidad luchó porque Ceuta accediera directamente a la fase 1 o "inicial" desde este lunes 4 de mayo. La respuesta en Madrid, como viene siendo una norma, fue una no respuesta o, en otros casos, un "esperaos".
La visión periférica del Estado sobre todo para Ceuta sigue siendo cero, como la fase en la que nos encontramos.
