Un previsible incremento de la ocupación de camas por pacientes covid en UCI y el sostenimiento de la tendencia a la estabilización de la incidencia acumulada de la enfermedad a 14 días. Ésta es la previsión que las autoridades sanitarias manejan para la evolución de la pandemia en Ceuta en los próximos días.
La nota epidemiológica correspondiente a la jornada de ayer, con datos referidos al martes, presenta un escenario “muy negativo” del escenario actual y subraya que las restricciones impuestas hasta la fecha no han producido “el efecto deseado”.
Hasta 105 brotes activos se contabilizan en Ceuta, la mayoría de ellos de origen familiar. El índice de trazabilidad en las últimas tres semanas se cifra en el 65,3%, lo que, según los criterios del Ministerio de Sanidad, describe una situación de “riesgo medio”, aún lejos del 80%, umbral que marca el estado de “normalidad”. La trazabilidad es el parámetro que mide de cuántos casos de los detectados se conoce el origen, es decir, qué proporción es contacto de otro positivo. Un porcentaje bajo implica que el sistema no es capaz de identificar las cadenas de transmisión y que la pandemia está descontrolada.
Otro indicador de la situación epidemiológica, éste de carácter asistencial, es el que establece el consumo de oxígeno en los centros hospitalarios. El pasado martes se llegó a consumir 1.100 litros, frente a los 300 registrados el 31 de diciembre pasado.
La letalidad, que informa del porcentaje de fallecimientos por covid sobre el número total de enfermos, ha descendido un 0,1%, lo que no evita que Ceuta registre el cuarto indicador más alto de toda España, por detrás de Aragón, Asturias y Castilla y León.
De las 2.180 dosis de la vacuna recibidas en Ceuta (1.098 de Pfizer y 200 de Moderna), han sido administradas el 92,1%.
