El jefe del Servicio de Medicina Preventiva y Salud Pública del hospital, Julián Domínguez, interpreta los datos preliminares del estudio de seroprevalencia como que "somos tremendamente afortunados", así lo ha reconocido en una entrevista en la televisión pública de Ceuta.
Afirma que "ser la provincia con menos prevalencia significa que la contención del brote se ha hecho muy bien". Domínguez explica que habiendo "menos muertes, menos ingresos, menos enfermedad, nos estamos dando tiempo y es lo que pretendemos, que no haya infectados, para cuando haya una vacuna o un tratamiento efectivos".
Julián Domínguez está de acuerdo con alcanzar la inmunidad de rebaño pero deja claro que "no a costa de que se mueran conciudadanos nuestros". Ha cifrado en mil las personas que han podido tener contacto con el virus, de los que 175 se han contagiado como ha certificado el Ingesa.
Sobre si estamos más expuestos a un rebrote más agresivo, Dominguez ha señalado que "estamos igual de expuestos, no más. No hay una razón para pensar que el virus vaya a ser peor en una segunda oleada o siguientes, ni tampoco mejor".
Sobre las medidas preventivas y la relajación del confinamiento, el doctor ha indicado que "no se ha cumplido el distanciamiento en los últimos casos que hemos tenido; son muy pocos, pero es una pena porque estábamos en cero y justo al empezar la desescalada hemos sumado once casos". Dos de ellos, este miércoles que, según Domínguez también son consecuencia del incumplimiento de las medidas de seguridad para evitar el contagio durante la desescalada: "La gente sigue sin cumplir las normas de distanciamiento y estos casos, prácticamente todos, indican que en algún momento ha habido rotura de la barrera de distanciamiento o no se han cumplido las medidas de higiene personal".
