El endurecimiento de las restricciones impuestas por la Ciudad para frenar el avance del coronavirus encuentra en la tasa de mortandad registrada en los últimos días una de sus justificaciones. Los datos oficiales muestran cómo la mortandad en Ceuta debida al virus multiplica por más de 5 la registrada en el conjunto del país a lo largo de la última semana.
Según ha recordado hoy en rueda de prensa el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, durante estos últimos siete días el número de fallecimientos notificados por las autoridades sanitarias en Ceuta ascendió a 9, lo que representa una tasa de mortandad de 10,5 por cada 100.000 habitantes. En el mismo periodo de tiempo, las 1.029 muertes registradas en España dejaron la tasa para el conjunto del país en 2 por cada 100.000 habitantes. “Es una tasa insoportable”, ha subrayado Vivas.
El resto de indicadores ayuda a dibujar el inquietante escenario en el que se ve sumida la ciudad en esta segunda ola de la pandemia. La evolución epidemiológica ha adquirido tintes críticos desde el día 23 de octubre, víspera del inicio de la sucesión de los fallecimientos que han sumado hasta el día de ayer 14 de los 28 decesos totales atribuidos al coronavirus en Ceuta.
Los casos diagnosticados por cada 100.000 habitantes durante las dos semanas previas han pasado de los 444,70 notificados el 23 de octubre a los 852,83 de ayer. En este periodo, las hospitalizaciones crecieron casi un 61%, pasando de 28 a 45.
Los indicadores acordados en su día por el Consejo Interterritorial de Salud para evaluar la situación epidemiológica de los distintos territorios siguen situando a Ceuta como zona de “riesgo extremo”. La ciudad multiplica por tres el índice de casos diagnosticados estimado como umbral para asignar esta consideración a un territorio, por dos el porcentaje de positividad (proporción de pruebas diagnósticas positivas), por 1,6 el porcentaje de camas hospitalarias ocupadas y por 1,8 el de plazas de cuidados intensivos.
