25 de septiembre

Beber de cine vuelve con la lucha de Alice contra el Alzheimer

Tras el paréntesis estival, Beber de Cine retoma sus actividades con la proyección de la oscarizada película, “Siempre Alice” que muestra la crudeza del Alzheimer y que supuso el galardón a la actriz principal para su protagonista, Julianne Moore.

siempre alice beber de cinePara llamar la atención sobre esta enfermedad y, coincidiendo que el 21 de septiembre se celebra el Día Mundial del Alzheimer), en Beber de Cine se solidarizan con esta iniciativa y por ello, poryectarán “Siempre Alice” el domingo 25 de septiembre, a las 12:00 horas en el Teatro Auditorio del Revellín, dentro del programa de colaboración con la Consejería de Educación, Cultura y Mujer, y con entrada gratuita.

 

Desgranando la película

Para Beber de Cine “en este film conmueve que la dolencia afecte a una persona tan joven y de una forma tan rápida y dura, trastocando toda su vida y la de sus familiares”. Destaca la interpretación de la actriz Kristen Stewart, que da vida a la hija pequeña de la protagonista, que mantiene un gran duelo madre-hija con Julianne Moore, eje principal de la historia.

La pelirroja actriz consigue hacer creíble la vulnerabilidad de la protagonista pero también su inteligencia y su tenacidad para ayudarse a si misma y no caer en la autocompasión. La película, sin embargo, no logra evitar algún que otro cliché, un intento de suicidio incluido, ni responder a ciertas cuestiones que emergen con el Alzheimer.

 

Sinopsis

“Siempre Alice” es una cinta de 2014, escrita y dirigida por Richard Glatzer y Wash Westmoreland y basada en la novela de Lisa Genova y que hizo ganar un Oscar, un Globo de Oro y un Bafta a su principal protagonista, Julianne Moore.

Alice Howland (Julianne Moore) está orgullosa de la vida que tanto esfuerzo le ha costado construir. A los cincuenta, es profesora en Harvard y una experta lingüista de fama mundial, con un marido exitoso y tres hijos adultos. Cuando empieza a sentirse desorientada, un trágico diagnóstico cambia su vida, al tiempo que su relación con su familia y con el mundo, para siempre. Con elegancia y delicadeza, la autora nos acerca a los sentimientos de quienes padecen Alzheimer y sus familias.