La Consejería de Educación y Cultura se ha visto obligada a programar una nueva función de “Compadres para siempre” dado el éxito de la programada para el día 10, de la que las entradas se agotaron en pocas horas.
Esta noche Fali y Rafi volverán a darlo todo sobre las tablas del Revellín a partir de las 21.00 horas.
La obra Compadres para siempre versa sobre dos inmaduros amigos cercanos a la cuarentena que han compartido andanzas desde la juventud. Son Rafi, a quien su esposa, Carmen, deja en la calle; y su compañero de fatigas Fali, cuyo único mérito ha sido casarse con una rica heredera madrileña a la que doce años atrás dejó embarazada en El Rocío y con la que vive en una urbanización exclusiva de Sevilla.
Fali, quien en otras ocasiones ha salvado a Rafi, se verá esta vez entre la espada y la pared, puesto que a pesar de la lealtad a su amigo se ve en la necesidad de deshacerse de él para no poner en peligro su status quo, amenazado por un suegro que nunca le perdonará la relación con su hija.
Los actores
El sevillano Alberto López estudió en la Escuela Superior de Arte Dramático de la capital hispalense y tiene experiencia en cine, televisión y teatro. Su papel en Ocho apellidos vascos terminó por impulsar su carrera, de la que también es destacable su participación en Zipi y Zape y el club de la canica, Grupo 7 y A puerta fría. En televisión ha intervenido en teleseries y programas de humor de audiencia nacional –por ejemplo, trabaja en Allí abajo- y en teatro, Malgama y Renglones imaginarios son algunos de los espectáculos en los que ha trabajado.
También sevillano, Alfonso Sánchez es licenciado en Comunicación Audiovisual y Arte dramático. Su Trilogía sevillana se ha convertido en un fenómeno dentro de las redes sociales, con más de diez millones de visitas en Youtube. En 2012 se estrenó en la gran pantalla como director con el largometraje El mundo es nuestro y formó parte del reparto de Grupo 7. Dos años después participó en Ocho apellidos vascos y, como su compadre rubio, trabaja en la serie Allí abajo.
