La idea de convertir la antigua torre de vigilancia de la Guardia Vivil en un museo viene de lejos. En 2004, el proyecto fue presentado por parte del artista ceutí Ginés Serrán Pagán a la Ciudad, pero por diversos problemas económicos, a los que ha habido que sumar la pandemia, han ido retrasado que este proyecto vea la luz. Un lamento del artista, que lleva “seis esperando a que empiecen las obras”, que siguen en proceso de contratación “y no he podido empezar a trabajar en el museo”.
Serrán es consciente del proceso administrativo que se ha de seguir, pero, afirma “es muy lento y me preocupa” y asegura que “el comercio necesita de esta clase de proyectos para dinamizar la economía local”, y desde su ánimo de espíritu constructivo, confía que “se acelere el proceso” y no sufra un nuevo retraso.
“Voy a donar y ceder indefinidamente a mi ciudad muchas de mis obras para crear este museo único en el mundo”
El museo mitológico de la Torre Marina Hércules va a contar “con obras impresionantes” en palabras del propio artista, donde se mezclarán esculturas clásicas, pinturas y cerámicas; con hologramas y nuevas tecnologías. Pero su atractivo principal será la figura de Hércules que girará, sobre una plataforma, 360 grados en 24 horas sobre la Torre, iluminado, causando un gran impacto estético.
“Voy a donar y ceder indefinidamente a mi ciudad muchas de mis obras para crear este museo único en el mundo” que se inaugurará este a finales de este año o a principios del próximo. Entre estas obras se encuentran Calipso y Hércules, ‘la unión del mundo’ como lo denomina Serrán Pagán. El artista ceutí afirma que el Museo Hércules de Ceuta “será el primer museo en el mundo dedicado a la mitología”.
“Será el primer museo en el mundo dedicado a la mitología”
El artista, un caballa de pro, espera que el museo “ayude a la ciudad en promover el turismo”, sobre todo el cultural, “y embellecer aún más nuestra bonita ciudad , educando a nuestros jóvenes que se sentirán, junto a todos los ciudadanos y visitantes, orgullosos de nuestro pasado histórico y mitológico”.
“Será impactante, cambiando la imagen de la ciudad” señala Serrán, que busca una similitud con Rodas y su Coloso. Para Ginés, la escultura que se va a trasladar desde la bocana del puerto tiene un significado muy especial y el cambio de ubicación de la estatua supondrá acercar una de sus obras "más queridas", y valoradas económicamente, a los ceutíes.
A diferencia de la estatua situada en la Plaza de la Constitución, el Hércules que separa (reflejo fiel la leyenda de la separación de los continentes), el Hércules que está en la bocana del puerto y que se trasladará a la Torre, representa la unidad.
Rememorando los sentimientos, desde la nostalgia de la ciudad que vio crecer a Ginés Serrán, el artista quiso plasmar, en esa escultura, la imagen de la unidad, cohesión y convivencia. “Nací con el sentimiento de cercanía con la península y sentí la necesidad de crear un Hércules que uniera, en un gesto de convivencia, unidad y paz, aunque distorsionara el mito”. Creó a ese otro Hércules, la unión del mundo, que une las columnas, como monumento a la paz que desea todo el mundo, en representación de los valores y sentimientos de un mundo “que no he dejado de investigar, cruzando fronteras, como lo hubiera hecho Marco Polo”.
“Respetando culturas lenguas y tradiciones"
Un símbolo de la unidad del mundo. “Respetando culturas lenguas y tradiciones, donde sólo importa la conciencia de respeto mutuo y cuidado la madre tierra. El punto final de un proceso evolutivo, desde el punto de vista antropológico, de un mundo que está cegado por sus intereses de fanatismos religiosos, políticos y económicos. Sin ver que lo que nos va a hacer felices es un mundo de unidad” apunta el artista ceutí.
Ginés Serrán va más allá y señala a la propia ciudad como eje de cohesión y convivencia. “Hemos crecido entre culturas” y con independencia de si se es musulmán, hebreo, hindú o cristiano “todos somos ceutíes y españoles, conviviendo en la misma ciudad y desde esa convivencia pacífica hemos crecido y ese sentimiento de unidad es cuando yo concebí el Hércules que en lugar de separar las columnas, las une”. Un símbolo de unidad que escenifica la importancia de la convivencia “aunque procedamos de diferentes culturas", concluye el polifacético artista.
