La Legión y el Muay Thai, de la mano/CEDIDA
El Muay Thai es una disciplina surgida en Tailandia, el Muay Boran símbolo nacional de la historia y la identidad del Reino de Tailandia, la cual se desarrolló debido a que esta nación siempre se hallaba constantemente en conflicto bélico con los reinos vecinos como Birmania y Camboya.
La ciudad se vio obligada a que sus soldados pudieran manejar con destreza las lanzas, espadas y la utilización del cuerpo como un arma en situaciones de combate a distancia corta.
Técnicas como las patadas, golpes con el puño, rodillas, espinillas, codos y ciertas maneras de derribar al adversario, fueron desarrolladas en ese tiempo medieval.
El muay thai era considerado como un arte esencial, y parte del currículum real para poder aspirar al trono de Tailandia, y está lleno de técnicas diversas siendo la adaptación como
deporte en la actualidad parecido al boxeo occidental, porque desde 1930 se adoptaron los guantes.
Tras la introducción del origen de la disciplina que imparte Fernando, comienza su andadura hace casi la friolera de treinta años, concretamente en el año 1985, en el gimnasio Ushiro cuando estaba en la calle Velarde, adentrándose en las artes marciales tales como Ninjutsu de la mano de Rafa Muñoz.
Se fue incorporando a las disciplinas como el Bujutsu, y el manejo de armas blancas como el tanto, el wakisachi, ninjator, o la katana, lanzas, arcos y abanico de estrellas .
Desde los 11 hasta los 16 años y fue tan su pasión y disciplina que a tan temprana edad consiguió el cinturón negro. Participando en seminarios con el gran Sensei Ninja.
De La Legión a los Balcanes
Fernando, que tiene sangre legionaria en sus venas y sus origenes en las arenas del Sahara, supo mezclar ese ardor guerrero con la lucha oriental, y con 17 años y su kimono de luchador para alistarse en el campamento Benítez en Málaga.
Gracias a la fuerza mental y la destreza física de las artes marciales superó la dureza del período de instrucción donde el abandono... estaba a la orden del día.
Cada vez que daba "un paso al frent " era una superación mental que se basaba en la fortaleza del Muay Tahai, deporte extremo que tiene su comparación con el Bushido, aquel código del samurai que instauró a base de credo el fundador Millán Astray.
La etica del Muay Thai, desde hacerse a uno mismo y útil al público, portar la moral en alto, entrenar y ejercitarse regularmente, tener buen cuidado de su nombre y del campamento, ser fiel a uno mismo y con los demás.
Y llegó la Mision a Bosnia, primera intervención de España fuera de nuestras fronteras tras la guerra civil, Sidi Ifni y la Guerra de Marruecos. Aquella misión donde la Legión lideraba el contingente de la Agrupación Málaga y tuvo la mayoría de bajas y según palabras emotivas de Fernando , "aquellos eran mis compañeros" .
"Después me vino como base para valorar mejor aquella etapa de mi vida que a la postre resultaría gratificante. Fué un período intenso que duró tres años desde el año 92 al 95 y tras regresar a la vida civil, ya el Muay Tahi entró en mi vida y pasó a formar parte de ella".
Así, desde el año 2000 se quedó en la capital malacitana para encontrarse con el profesor Alfonso Rodríguez Ríos y aprender y mejorar las tecnicas hasta graduarse como instructor.
"No he dejado de dar clases y seguir mejorando, sigo de instructor en el Nola y en el Venus ambos gimnasios de Ceuta y recientemente estuvo en Ceuta Alfonso Rodríguez Ríos impartiendo un seminario en el Ushiro", dice
"Esta es mi vivencia y desde que fuí un niño y me llamó aquella sensación de ser tan fuerte como el acero, tan duro como el diamante con disposiciónn y determinación", concluye.
