CREE QUE ESPAñA ESTARá EN RíO

Guillermo Molina: "El futuro del waterpolo español lo veo negro, pero seguimos haciendo milagros"

Guillermo Molina ha realizado unas declaraciones en Mundo Deportivo en las que lamenta la situación del waterpolo español que cada vez es un deporte más amateur, aunque a la selección se le pide que luche por las medallas en las grandes competiciones. El ceutí ve factible clasificarse para los Juegos de Río.

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photo_camera Guillermo Molina, que juega en el Brescia, se marchó a Italia hace nueve años para poder vivir del waterpolo

Guillermo Molina entiende que "tenemos una oportunidad preciosa para meternos en unos Juegos Olímpicos que siempre es especial. Tenemos muchos números, pero tenemos que hacer nuestro trabajo".

De los rivales en la fase de grupos, tiene claro que "Italia es el más fuere, hay un partido trampa con Alemania el segundo día y los demás, no hay que menospreciar a ninguno porque hay que recordar que Kazajistán nos dejó, entre comillas, fuera del Mundial porque ganó a Montenegro. Todos sabemos que el rival de nuestro nivel es Italia, pero los otros te pueden dar problemas", añade.

De la situación del waterpolo en España explica que "cada vez somos más amateurs, cada vez tenemos menos presupuesto en los clubes, no pasa nada porque seguimos haciendo milagros. Los clubes hacen lo que pueden, no es sólo su culpa, pero lo cierto es que los jugadores cada vez somos más amateurs y así no se construye el futuro. Hay que sentarse y pensar, porque cuando consigues una clasificación olímpica es muy fácil salir en la foto, lo que no miran por detrás es que a lo mejor hay mujeres y hombres que cobran 200 euros al mes y tendrán que dejar el waterpolo".

El ceutí, que se marchó a Italia en el 2007 para poder vivir del waterpolo, indica que "aquí hay gente que no cobra y estamos en la selección nacional, dime un deporte que no cobre o que tenga una dieta 150 ó 200 euros. Nos ven y piensan, selección nacional, qué bueno, pero no. Están sufriendo los jugadores, los clubes, las federaciones. Realmente hay un problema económico y todo apunta a que en cinco años seremos amateurs casi todos, en el momento que Barceloneta, Sabadell y Terrassa ya no puedan mantener a jugadores de selección, tendremos problemas".

Preguntado por el futuro del waterpolo español, responde que "lo veo negro, pero en España seguiremos haciendo milagros, nos seguiremos entregando para los Juegos, pero no es una hoja de ruta. El staff técnico sí tiene una hoja de ruta con los jugadores que hay ahora, pero estos jugadores a lo mejor quieren ser doctores o tienen que prepararse para Policía y dirán, ‘si yo en waterpolo no puedo jugar porque me dan 200 euros’ pues hasta luego waterpolo. Yo no quiero que llegue ese día, pero todo apunta a eso.

De su regreso a la selección, con la que debutó con 17 años en el Mundial de Fuckuoka donde se colgó la medalla de oro, señala que "necesitaba descansar, llevaba cinco años metiendo el polvo debajo de la alfombra y no aportaba nada bueno, todo era desgana en un grupo que empezaba con seleccionador nuevo. Muchas veces es mejor dar un paso al lado y dejar que sigan y después, si puedes, vuelves. Por suerte, Gabi me ayudó a volver, yo ya estaba fresco, podía aportar cosas positivas que al final es de lo que se trata".

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