Rotundidad. Ésta es la palabra que el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha utilizado esta mañana para definir la actitud que el gobierno local mantendrá hacia la empresa Cepsa tras los vertidos contaminantes detectados en el litoral ceutí durante el último mes. Vamos a evaluar si las instalaciones de la compañía se encuentran en condiciones, si se han seguido las normas establecidas, si se han hecho los controles y las inspecciones, y en eso vamos a ser rotundos, ha aseverado el presidente.
La aparición de los dos últimos vertidos ha generado la alarma entre las asociaciones conservacionistas y las empresas portuarias que ven afectados sus negocios por las consecuencias de la polución. El pasado 11 de diciembre, las autoridades desplegaron los sistemas de contención contra la mancha de fuel oil aparecida en aguas del litoral. Posteriormente, nuevos vertidos fueron descubiertos en la playa de Benítez, aunque en esta ocasión no alcanzaron el mar. En ambos casos, el origen de la contaminación fue situado en las instalaciones de Cepsa.
Vivas ha defendido, sin embargo, la diligencia de las administraciones implicadas a la hora de enfrentar las sucesivas alertas. Según el presidente, los protocolos han sido aplicados eficazmente y la coordinación entre la Delegación de Gobierno, la Ciudad, la Autoridad Portuaria y la Capitanía Marítima se ha conducido de manera fluida.
Lo que sí vamos a aplicar es la normativa en lo que se refiere al principio de quien contamina paga, ha concluido el presidente quien, sin embargo, se ha remitido a los informes técnicos que están aún por elaborar para evitar pronunciarse sobre si se impondrán o no sanciones a Cepsa.
Inquietud en Los Verdes
A las quejas planteadas este mismo lunes por las empresas portuarias por los perjuicios económicos que vienen sufriendo a consecuencia de las obras de reparación en las instalaciones de Cepsa, que han supuesto la suspensión del suministro de combustible a buques, se han sumado hoy las de los ecologistas.
El portavoz de Los Verdes, Juan Redondo, ha manifestado la preocupación que anida entre los activistas de su asociación ante la posibilidad de que la contaminación llegue a alcanzar el Parque Marítimo del Mediterráneo. Redondo ha alertado de que tal posibilidad podría llegar a darse por cuanto que las aguas que nutren los lagos del complejo proceden de zonas que podrían estar contaminadas. Es algo en lo que las autoridades deberían pensar, pues al margen del daño que ya se ha hecho al medio ambiente, no nos podríamos permitir que se viera también afectada la joya de nuestro turismo, ha advertido.
Redondo también ha solicitado la convocatoria de una reunión del consejo sectorial de Medio Ambiente para estudiar la situación generada por los vertidos.
