La mayoría de los concentrados pertenecen a la Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP) y de la Unión Federal de Policía (UFP), que acusaron a los funcionarios de la Agencia Tributaria de cobrar una prima por cada carta que le envían.
Este hecho fue confirmado por el delegado en Ceuta de la APFP, José María Raya, que ha explicado que ha defendido que la mayoría de los funcionarios que han participado en la protesta llevan una larga temporada viviendo en Ceuta, “muchísimo más que los funcionarios que nos acusan”.
“Se nos localiza en cualquier lugar de la Península para dudar de nuestra residencia, y tergiversando lo que dice la Ley, nos exigen que demostremos una residencia en la ciudad, que está más que demostrada con las pruebas que nosotros aportamos”, ha dicho Raya.
El portavoz precisa que lo que establece la Ley es 183 para “residir en España, y luego vive en la comunidad autónoma en la que permanezca la mayor parte del período impositivo”. Esto contradice, según los afectados, el criterio que se está aplicando por parte de la AEAT.
Los concentrados, que portaban pancartas con el eslogan de Hacienda miente; yo soy residente. Impuestos sí, abusos no, entre otras, se reunieron en la Plaza de los Reyes a la altura del lateral de la iglesia de San Francisco, para, posteriormente, dirigirse hasta las puertas de la Delegación del Gobierno, en la que había desplegado un dispositivo de la Policía Nacional.
Raya ha negado que los funcionarios hayan defraudado a Hacienda, aunque hay que tener en cuenta que los “funcionarios de la Agencia Tributaria que nos mandan las cartas reciben un plus de productividad por cada carta enviada”.
La Agencia Tributaria, ha precisado, nos “manda una paralela y nos da un plazo, exiguo, de diez días para que aportemos una serie de documentos que prueben nuestra residencia en Ceuta, aunque aportemos lo que aportemos, para Hacienda siempre es insuficiente…”.
El portavoz ha desvelado que son muchos los funcionarios que cuentan con sentencias favorables del Contencioso Administrativo, “aunque el sufrimiento hasta que llega ese momento no nos lo compensa nadie”. El colectivo no quiere que se haga ninguna excepción, lo “único que pedimos es que se nos aplique la Ley, pero no la que se inventan estos señores, que no es la española”.
Al final, el grupo se trasladó hasta las puertas de las instalaciones de la Agencia Tributaria a gritos de “granaino devuelve la comisión”, en alusión, al parecer, al funcionario que hacen responsables de los problemas que les viene afectando.
