El pasado día 26, tras el pleno de las interpelaciones, se celebró junta general de la sociedad en la que se comunicaron las bajas de los representantes del PP, Alfonso Conejo, y del PSOE, Ramón Lladó. También se procedió a los nombramientos de Kissy Chandiramani, por parte de los populares, y Rafael García, por parte del PSOE, para ocupar los puestos vacantes.
Ahora, en la reunión del consejo de administración, se procederá a la elección del presidente o presidenta del mismo. Si el PSOE mantiene la misma postura que en otras ocasiones, abstenerse, la presidencia recaería en el Partido Popular. Si los socialistas se abstienen y si Vox, Caballas y MDyC votasen en contra de la propuesta de Kissy Chandiramani como presidenta, se produciría un empate, que quedaría resuelto automáticamente a favor del PP al ser el partido más votado en las pasadas elecciones.
En el orden del día también aparece, según fuentes solventes, la propuesta de cese del actual gerente de la sociedad, Juan Martín Portes, tal y como ha perseguido con insistencia el Gobierno desde el consejo de administración de agosto, algo que no ha podido lograr hasta ahora. Han hecho falta que tengan que salir del consejo dos representantes, Conejo y Lladó, para que sus deseos se conviertan en realidad.
La duda está en el cargo que va a ostentar en la empresa el sustituto de Martín Portes, Juan Manuel Sánchez Valderrama. La primera idea era la de suprimir el cargo de gerente y darle todo los poderes a Sánchez Valderrama, que ocuparía el puesto de director general técnico.
Esta propuesta fue desestimada y ahora la que baraja el Gobierno es la de nombrarle gerente, puesto que Sánchez Valderrama ya ocupó y del que fue destituido por el Partido Popular.