Economía
La cara oculta del negocio
Los empresarios reclaman a las autoridades la ampliación del horario del tránsito de mercancías por la frontera de El Tarajal desde las 8.00 hasta las 17.00 horas y la apertura del paso de Benzú. Ambas medidas fueron acordadas durante la reunión que los miembros del comité ejecutivo de la Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE) mantuvieron en el transcurso de la tarde de ayer.
La dirección de la organización empresarial planteaba estas medidas para su adopción a corto plazo cuando todavía se recuperaba de la sorpresa que ocasionaban las revelaciones que esa misma tarde hacía la Ciudad sobre el futuro de El Tarajal y sus polígonos. El Gobierno local anunciaba mediante un comunicado de prensa el paquete de actuaciones fiscales y policiales que, en colaboración con la Delegación del Gobierno, se pondrán en marcha tras la anunciada apertura del paso de El Tarajal II el próximo abril.
La CECE confía ahora en que las medidas anunciadas por las autoridades, de las que los empresarios confiesan haber tenido conocimiento tan sólo por los medios de comunicación, se complementen con sus propuestas.
Más tiempo y más pasos
Más tiempo para el tráfago de mercancías y más puntos para su entrada y salida a través de la frontera. Ésta es la idea manejada por los representantes empresariales, quienes consideran que la apertura del paso de Benzú facilitaría la ordenación de la frontera y los polígonos. La patronal pone como ejemplo el sistema de cinco pasos instaurados en Melilla donde, a pesar de que el volumen de mercancía en tránsito es mayor que en Ceuta, no se producen los problemas que padece el entorno de El Tarajal.
Otras de las medidas sugeridas por la CECE hacen referencia a la necesidad de eliminar los denominados “plantones”, individuos que ejercen a modo de controladores de las colas de porteadores, y a la conveniencia de incrementar la presencia policial.
Seguridad jurídica
La intención de la Ciudad de conceder la consideración de expedición comercial a los fardos que alcancen un determinado tamaño y de instituir una tasa municipal sobre la actividad del llamado “comercio del bulto” ha encontrado el rechazo del empresariado local. Frente a estas iniciativas, la CECE exige un cambio de normativa que conceda seguridad jurídica a los comerciantes que desarrollan actividades de compraventa a través de la frontera. “La idea es la de que el empresario sepa en qué casos la Guardia Civil permitirá el tránsito de las mercancías, qué cosas se pueden pasar y qué cosas no”, explica el secretario general de la organización empresarial, Alejandro Ramírez.
El Gobierno local advertía ayer mismo de que, en el caso de que la proyectada tasa municipal no pueda finalmente aplicarse, sopesará la posibilidad de introducir modificación del IPSI para determinadas mercancías. La CECE, cuyo comité ejecutivo ya ha descartado la viabilidad de la tasa, ha pedido que cualquier cambio en el IPSI que pueda autorizarse no se limite al ámbito de los productos que cruzan la frontera. Los empresarios aspiran a que el Gobierno de la Ciudad acepte definitivamente su vieja aspiración de que se acometa una revisión del tipo general del impuesto.
La relación de demandas de los empresarios no para aquí. La patronal ceutí también reclama la regulación de la venta ambulante y la habilitación de un espacio para la inspección de vehículos que evite colapsos en las colas a la salida del puerto y la entrada a Marruecos.
La dirección de la CECE también ha pedido a las administraciones una mayor participación en las conversaciones que se mantengan para hallar una salida a los problemas de El Tarajal. La organización lamenta no haber sido informada de los últimos acuerdos alcanzados. De hecho, la patronal ni tan siquiera conocía la intención del Gobierno central de abrir en abril el paso de El Tarajal II. La entidad manejaba como última referencia la que le aportó el delegado del Gobierno, Nicolás Fernández Cucurull, en el transcurso de la reunión que mantuvo con la dirección empresarial con motivo de su toma de posesión del cargo el pasado verano. Entonces, Fernández Cucurull aseguró que el paso se abriría en febrero.
Todas las medidas propuestas por los empresarios serán remitidas a la Delegación del Gobierno y a la Ciudad para su toma en consideración.
