El Ejecutivo ha alcanzado un acuerdo con el Banco del Mediterráneo y con la mercantil Isolux Corsán para tal menester, según ha explicado el portavoz del Gobierno, Jacob Hachuel, a la conclusión de la reunión semanal del Consejo de Gobierno.
Hachuel ha razonado que el incremento del uso propicia una revalorización de la zona, por lo que el Ejecutivo ha alcanzado un acuerdo con la propiedad consistente en compensar a la Ciudad “con un número de metros cuadrados según la equivalencia de la revalorización de los terrenos”.
Todo ello con la intención de que no exista “especulación ni enriquecimiento por parte de la empresa” con el acuerdo alcanzado. El número de metros cuadrados con los que será compensada la Ciudad vendrá determinado por los técnicos, ha precisado Hachuel, y de esta forma se conseguirán dos objetivos: Darle más vida a la Plaza Nelson Mandela con la instalación de nuevos comercios, “lo que generará más empleo”. Por otro lado, la Ciudad se beneficia al ser compensada con terrenos en la zona.
Arasti Barca
El portavoz, a pregunta de los periodistas, también se ha referido al problema de los monitores de la empresa Arasti Barca. Hachuel ha asegurado que el asunto “se sigue estudiando, y la intención del Gobierno es que ninguno de los monitores se vea perjudicado, aunque no es fácil”.
La decisión política, ha detallado, tiene que estar acompañada a que esté “ajustada a derecho”. El portavoz ha reconocido que una de las propuestas era la de la ampliación de actividades.