La publicación de los audios de Whatsapp de miembros de Vox se han convertido en un serio problema para el partido y el Grupo Político de la Asamblea. Pero hay más, la investigación en la que está inmerso Vox desde hace meses, ha puesto muy nerviosos a varios miembros de la formación política.
El primero que ha tomado la decisión de alejarse de la situación tan embarazosa en que le ha puesto el partido es Francisco José Ruiz "Pachi".
La confrontación y la tensión en el seno de Vox Ceuta crece por días. Parece que ahora se están dando cuenta del enorme lío en que se ha metido la formación.
El pasado 10 de febrero Juan Sergio Redondo y Francisco José Ruiz pasaron por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 para declarar en calidad de investigados por los whatsapps de contenido racista y xenófobo que presuntamente se intercambiaron en un grupo formado por militantes del partido. Ambos, acusados de la presunta comisión de un delito de odio, negaron a responder a las preguntas formuladas por la acusación popular ejercida por la formación política MDyC.
El juez ordenó a los dos diputados a la Asamblea que entregaran sus teléfonos móviles para cotejar el contenido de las aplicaciones en las que se volcaron los mensajes que han llevado a los parlamentarios ante los tribunales. Redondo objetó que no disponía de móvil en ese momento, ante lo cual el juez la instó a salir del Palacio de Justicia para ir a buscarlo. A toda prisa, el presidente de Vox abandonó las instalaciones para regresar a los pocos minutos con su teléfono.
En sus respuestas al juez y a su letrada, tanto Redondo como Ruiz manifestaron que no recordaban los detalles sobre los que se les preguntaban.
Esta investigación está provocando que Vox no acierte en sus comunicados, poniendo de mentirosos a los medios de comunicación. Solo es cuestión de tiempo.
