De la reunión que mantuvo este lunes el presidente de la Ciudad con el ministro de Asuntos Exteriores, Juan Manuel Albares, poco se puede sacar o decir, al menos en cuanto a novedades que conciernen a la esperada aduana comercial, cuya apertura ha sido postergada en el tiempo sin una fecha concreta, pese a que se había anunciado a bombo y platillo hace meses que en enero estaría en funcionamiento. Los datos deslizados esta semana caminan en la misma senda y el presidente Vivas sigue sin soltar prenda. Ya sea porque no hay más, o por la prudencia por la que su equipo apela a seguir esperando.
“Lo que saco de la reunión es que para el ministro es firme e irreversible la implantación. No le puedo dar una fecha porque el ministro tampoco la dio, pero sí sé que después de que se celebrase la RAN el ministro estaba convencido de que se iba a implantar, y esto es algo positivo”, ha asegurado el presidente en la televisión pública este jueves.
Para Vivas la apertura todavía se encuentra en fechas prudenciales, aunque ha advertido que no puede ser sine die. No obstante, ha afirmado conocer que el titular de Exteriores dispone de un calendario, y defiende que no lo desvele. “Creo que está en su derecho de aplicar la prudencia y no dar una fecha para que no suponga una presión que pueda ser perjudicial. Se trata de ir dando pasos hasta alcanzar la normalización plena. De índole técnica, aduanera… El ministro nos pidió margen de confianza y le dijimos que siempre que se caminara al servicio de ese objetivo (calificado de irreversible) lo iba a encontrar. También para hacer labor de pedagogía en el sentido de arrimar todos el hombro”.
