Se confirma la anunciada prórroga de la frontera que deja su apertura en el aire, hasta al menos, 2022

Las últimas informaciones apuntaban que las conexiones no se retomarían, como mínimo, hasta la segunda mitad del próximo año

Vista de la frontera de El Tarajal (C.A./ARCHIVO)
photo_camera Interior prorroga el cierre del paso fronterizo hasta, al menos, el 31 de enero de 2022. (C.A/ARCHIVO)

Diciembre no va a ser el mes de apertura de la frontera. Todas las voces e indicios ya lo tenían descartado. Adquiría más fuerza hace tan solo unos días cuando las instituciones alauitas prolongaban su estado de emergencia y sanitaria, e Interior lo ha terminado de confirmar este miércoles vía publicación en el BOE, donde se vuelve a recoger la prórroga, al menos hasta el 31 de enero, de los viajes permitidos con terceros países y, nuevamente, no aparece Marruecos.

Todo apunta a que  el inicio del nuevo año no llegará con una distensión de las relaciones entre sendos reinos. Con una crisis diplomática pendiente de solucionar, tanto Madrid como Rabat continúan al amparo de la crítica situación sanitaria para mantener sus conexiones cerradas a cal y canto. Y, entre todo este desaguisado, las primeras informaciones que se sostienen señalan la segunda mitad del 2022 como el escenario proclive a una apertura de las puertas.

Sin embargo, nada será como lo hasta ahora conocido. La frontera abrirá en otras condiciones. Lo ha repetido en más de una ocasión la delegada Mateos, lo refrendó este lunes el presidente de la ciudad, y el Gobierno de Sánchez ya ha empezado a engrasar la maquinaria, mientras espera a que Marruecos entierre el hacha de guerra, para encauzar ese cambio.

Para ello ha creado una comisión de representantes de al menos seis ministerios para prepararse ante la futura reapertura a través de la que insuflar cambios comerciales, socioeconómicos y de control fronterizo para el nuevo escenario que se va a producir, y que será muy diferente al conocido hasta ahora.

La intención es que España avance en su propio plan independientemente de las decisiones que tome Marruecos, que -como lamentaba el equipo de Pedro Sánchez en un documento interno del pasado verano- mantiene una estrategia de “presión económica” y “asfixia” sobre Ceuta y Melilla.

Así, la hoja de ruta marcada por dicha Comisión se cierne en la pura gestión de la frontera. Sin embargo, a un plazo más breve, sigue pendiente el plan de rescate socioeconómico que el Gobierno prometió a raíz de la crisis migratoria del pasado mayo. Y con la certeza de que el porteo nunca volverá, las líneas maestras de los Ministerios implicados han marcado con base para trabajar contemplar las aduanas como comerciales, la catalogación de ‘ciudades-isla’, la entrada en Schengen, un control de vacunas, la implementación de la frontera inteligente, reconsiderar el asilo y refugio para sus ciudadanos, la revisión del padrón y la elaboración de un plan de seguridad.