en marzo se planteó a marruecos la posibilidad de crear este nuevo acceso

La apertura de un paso fronterizo junto a la ITV no está en agenda

El anterior delegado del Gobierno reveló en marzo que se negociaba con Marruecos la posibilidad de abrir un nuevo acceso para el tránsito de los automóviles que a diario trasiegan mercancía de un lado a otro de la frontera.

Tramo de la valla fronteriza situado junto a las instalaciones de la ITV (C.A.)
photo_camera Tramo de la valla fronteriza situado junto a las instalaciones de la ITV (C.A.)

Las medidas impulsadas en las últimas semanas por la Delegación del Gobierno para favorecer los tráficos a través de la frontera han dejado tras de sí anuncios de la anterior administración que todavía no se han traducido en hechos.

Uno de los proyectos que duerme el sueño de los justos es el de la apertura de un nuevo paso fronterizo. El anterior delegado del Gobierno, Nicolás Fernández Cucurull, reveló el pasado marzo que Madrid y Rabat se encontraban en plena negociación para la apertura de un nuevo acceso entre Marruecos y Ceuta que estaría emplazado en la zona donde se ubican las instalaciones de la Inspección Técnica de Vehículos. La idea era la de dedicar este paso al tránsito de los automóviles que a diario trasiegan mercancía de un lado a otro de la frontera. Según reveló el exdelegado, la negociación también contemplaba la habilitación en la zona marroquí de Arroyo de las Bombas de un área para el estacionamiento de vehículos, un recurso con el que evitar congestiones de tráfico. Las autoridades españolas no han vuelto a hacer mención desde entonces a este proyecto que, según fuentes de la Delegación del Gobierno, no figura actualmente en su agenda.

Otro de los asuntos pendientes es el de la reforma integral de la frontera, cuya necesidad han defendido los sucesivos gobiernos de PP y PSOE. El proyecto parecía que comenzaba a consumir plazos cuando hace ahora nueve meses Fernández Cucurull presentaba los planos del nuevo diseño ideado para las infraestructuras fronterizas. Conforme a lo detallado por Fernández Cucurull, el nuevo Tarajal I preveía solventar las congestiones de tráfico mediante la habilitación de siete carriles reversibles, uno de los cuales sería utilizado en exclusiva por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. “Había mucha afición por los planos y poca por su ejecución material”, desautorizaba al anterior delegado la nueva secretaria de Estado de Seguridad, Ana Botella, durante la visita que hizo a la ciudad el pasado octubre. En enero del pasado año, el diputado al Congreso, Juan Bravo, aventuraba que 2018 sería el año de las primeras obras en El Tarajal, vaticinio que finalmente no se cumplió.