La apertura del Tarajal II, tras el parón de la Semana Santa, ha traído de nuevo los atascos a la carretera que va hacia la frontera. Colas interminables de vehículos que ven como pasan los minutos sin avanzar un solo metro. Junto a los coches mula que cargados de mercancía hacia Marruecos, los vehículos particulares se meten en una ratonera de la que es difícil salir sin realizar alguna maniobra prohibida y como siempre, el consiguiente perjuicio que supone para los servicios de emergencia ya que esta carretera es la vía más rápida de comunicación con el Hospital Universitario de Ceuta.
Ante estga situación, ayer varios conductores perdieron los nervios, apagaron los motores y se bajaron de sus coches para protagonizar una improvisada protesta. Mientras, la cola avanzó pero ahora eran esos coches parados los que provocaban otro nuevo embotellamiento. Los GRS tuvieron que intervenir y ante la negativa de mover sus coches, dos hombres fueron detenidos.