confían en que el rigor de los controles se relaje para que no afecte a la economía

Los empresarios consideran que las restricciones en la frontera no pueden tener carácter permanente

La Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE) advierte de que las aglomeraciones que desde hace una semana se registran a diario al otro lado de la frontera también afectan a turistas y trabajadores. 

Frontera de El Tarajal (C.A.)
photo_camera Frontera de El Tarajal (C.A.)

Las restricciones al paso de los ciudadanos marroquíes por la frontera no pueden ser permanentes. Esta es la convicción que anida en el seno de la Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE), cuyos responsables no ocultan su preocupación por las consecuencias que las limitaciones impuestas por la Delegación del Gobierno al tránsito fronterizo pueden tener sobre la economía local.

Los empresarios recuerdan, además, que la política de permitir el paso a la ciudad solo a las personas que acrediten estar en posesión del permiso de residencia o del pase de trabajador transfronterizo vulnera la excepción del acuerdo Schengen. Dicha excepción hace posible que los residentes en la región de Tetuán puedan acceder a Ceuta sin necesidad de visado. “No puede ser una medida permanente: incluso los turistas y los trabajadores en regla se ven afectados por las aglomeraciones que se producen al otro lado de la frontera”, argumenta el secretario general de la CECE, Antonio Ramírez.

El portavoz empresarial manifiesta su apoyo a la Delegación del Gobierno en su estrategia de evitar el tráfico de mercancías a través de Tarajal I y los consiguientes problemas de orden público que generan los porteadores que cada tarde tratan de acceder a Marruecos por este paso. Sin embargo, Ramírez subraya la necesidad de no perjudicar al comercio y la hostelería locales, principales afectados por el efecto disuasivo que para los visitantes tienen las aglomeraciones que desde hace una semana se vienen produciendo a diario en el lado marroquí.

“Confiamos en que la cosa se normalice para que, al menos hasta el día 20, las actividades comerciales en los polígonos puedan desarrollarse sin problemas”, confía Ramírez. El porteo quedará suspendido entre el 20 de diciembre y el 8 de enero con motivo de las fiestas navideñas.

El secretario general de la CECE también ha defendido la necesidad de que los controles de paso se relajen durante las fiestas navideñas, fechas en las que los comercios y la hostelería locales sustancian una buena parte de sus ventas anuales.

 

Entrando en la página solicitada Saltar publicidad