El delegado del Gobierno, Nicolás Fernández Cucurull, ha reconocido que el traslado de agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil a Cataluña ha afectado al dispositivo de seguridad en la frontera. Fernández Cucurull ha hecho esta reflexión tras ser preguntado por los incidentes registrados en los últimos días a consecuencia de la aglomeración de porteadores que tratan de entrar en Marruecos con sus mercancías a través del paso oficial de El Tarajal.
“No tenemos los recursos extraordinarios de los que disponíamos para evitar acumulaciones, pero espero que en un plazo razonable podamos volver a la situación anterior”, ha confiado el delegado, quien ha tenido palabras de agradecimiento para la Guardia Civil. “Están dando lo mejor de sí mismos”, se ha felicitado.
El delegado ha denunciado la existencia de intereses que se ven favorecidos por las alteraciones de orden público en el entorno de la frontera. “Son quienes en el desorden encuentran su beneficio, y contra eso hay que actuar”, ha sostenido.
Facilidades al turismo
El representante de la Administración central en la ciudad ha destacado la apertura durante los viernes, y algunos fines de semana completos, de todos los carriles de entrada y salida en el paso fronterizo. La medida, solicitada por los comerciantes, se ha traducido en una afluencia notable de turistas en esas jornadas.
Fernández Cucurull también ha revelado que se continúa trabajando para determinar si resulta viable la apertura de un segundo paso fronterizo.
