Los colapsos en esta vía son habituales desde hace semanas con el consiguiente riesgo y perjuicio que supone para vehículos, servicios sanitarios y de emergencias, medios de transporte públicos y vecinos ya no solo de las zonas aledañas a la nacional sino cualquier que pretenda moverse por la ciudad. La Policía Local se afana a estas horas en intentar ordenar el tráfico, sobre todo para que aquellos vehículos que quieren circular en dirección al centro de la ciudad puedan hacerlo.
Estos embotellamientos están provocados por los coches "mula", es decir, vehículos con matrículas marroquíes cargados de la mercancía que no ha podido cruzar a espaldas de los porteadores. La frontera, con su actual infraestructura, no es capaz de absorber la gran cantidad de vehículos que pretenden entrar a Marruecos y que son revisados por las autoridades competentes.