Alerta de que las aglomeraciones en la frontera pueden dar lugar a "una desgracia"

El Gobierno local siente "frustración" por la reunión de Rabat y "estupor" por la cita de Sánchez y Torra

El portavoz accidental del Gobierno, Carlos Rontomé, lamenta la falta de respuesta de Madrid a las peticiones de ayuda formuladas por la Ciudad ante la crisis fronteriza abierta con Marruecos.

“Frustración”. Éste es el sustantivo al que hoy ha recurrido el portavoz accidental del Gobierno municipal, Carlos Rontomé, para calificar su percepción de los resultados arrojados por la reunión que ayer mantenía en Rabat el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, con su homólogo marroquí Abdelouafi Laftit.

Rontomé ha lamentado que en el transcurso del encuentro el ministro español no planteara a Laftit sus quejas sobre la situación que atraviesa la frontera de Ceuta, cuya fluidez ha quedado condicionada por los rigurosos controles impuestos por el país vecino al paso de vehículos y personas.

“Puede ocurrir una desgracia”, ha advertido el portavoz accidental en referencia a las aglomeraciones de personas que se registran en la frontera desde que Marruecos iniciara su política unilateral de endurecimiento de las exigencias al tránsito entre ambos países. Rontomé ha llegado a asegurar que la situación en el paso fronterizo ha quedado “al albur” del país vecino.

A la frustración aludida, Rontomé ha unido el sentimiento de “estupor” que, según ha asegurado, anida en el Gobierno municipal ante la cita que ayer reunía a Pedro Sánchez con Quim Torra en Barcelona. “Hemos visto cómo el presidente acudía casi a rendir pleitesía a una persona que está inhabilitada mientras que nosotros esperamos desde hace quince días, cuando se le pidió ayuda por escrito, y no hemos recibido ningún tipo de respuesta”, se ha quejado el político popular. La Ciudad remitió a Sánchez y a la ministra de Política Territorial, Carolina Darias, sendos escritos con una relación de siete reivindicaciones dirigidas a superar la crisis fronteriza abierta con el país vecino.