Después de un día de caos y colapso, este domingo las inmediaciones de la frontera presentan un panorama mucho más tranquilo y fluido.
Esta tarde, la zona de embolsamiento acogía unos 500 vehículos que esperaban para acceder a Marruecos.
La N-352 tampoco presenta retenciones de consideración. Ayer a las doce de la noche la cola de vehículos llegaba a Juan XXIII.
Caballas ha exigido responsabilidades políticas, después de lo vivido este sábado y espera que esta situación no se vuelva a repetir.