Desde primera hora de la mañana los controles que están llevando a cabo las autoridades marroquíes en la frontera está ralentizando la entrada de vehículos en la ciudad y acabando con la paciencia de los conductores que intentan acceder a los polígonos para cargar los coches con mercancía. A las 10 de la mañana, y tal y como contaba Ceuta Actualidad, la cola de coches llegaba hasta el hotel Ibis. Una situación que lejos de mejorar con el paso de las horas no ha hecho más que empeorar dadas las restricciones de tráfico. Esto en cuanto al tráfico rodado pero en el tránsito de personas las cosas no están mejor aunque bien es cierto que con el cierre de los polígonos y del Tarajal II las aglomeraciones al otro lado de la frontera han ido desapareciendo. Una jornada más entrar en Ceuta se ha convertido en misión imposible tanto para quienes vienen a ganarse la vida como a los que pretenden entrar a comprar o hacer turismo. La misma suerte están corriendo quienes pretenden salir de la ciudad. De nuevo la Nacional 352 es escenario de colapsos circulatorios.
España también ha tomado cartas en el asunto para intentar controlar la entrada de vehículos. Desde hace una semana se prohíbe el paso a los coches que no cumplan las condiciones técnicas, que no tengan la “carta verde”, o seguro internacional de vehículos a motor en vigor y que no sean conducidos por su propietario. Con esta última medida, se pretende colaborar con las autoridades marroquíes en la erradicación de las flotas de vehículos dedicados al porteo en manos de un mismo propietario.
