"Al delegado del Gobierno no se le puede pedir más de lo que hace"

El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, considera que las medidas adoptadas en la frontera por Fernández Cucurull han permitido incrementar la seguridad.

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photo_camera Vivas y Fernández Cucurull, en una comparencia ante los medios/ C.A./ARCHIVO

“Al delegado del Gobierno no se le puede pedir más de lo que está haciendo”. El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha salido en defensa de la política que Nicolás Fernández Cucurull viene aplicando para ordenar los flujos de personas y mercancías a través de la frontera. Vivas hace este pronunciamiento después de las críticas que el delegado del Gobierno ha recibido por sus declaraciones a propósito de la conflictiva situación que casi a diario se vive en la carretera que conduce a la frontera de El Tarajal. Fernández Cucurull se negó a aceptar el calificativo de “caótico” para definir las congestiones de tráfico que habitualmente obligan a quienes desean cruzar a Marruecos a soportar horas de espera.

Vivas ha valorado los resultados que en el control de lo flujos en la frontera han reportado las medidas adoptadas tras la apertura del paso de El Tarajal II. El presidente ha considerado que todas estas actuaciones han redundado en un incremento de la seguridad, unas mejores condiciones para las porteadoras y la reducción de los altercados públicos generados por los hacinamientos. “Hay que apoyar al delegado del Gobierno, que se está empleando en cuerpo y alma por mejorar la situación”, ha reclamado.

 

Protesta y paso de Benzú

La gestión del delegado ha animado a un grupo de empresarios a organizar este lunes una concentración ante las puertas del Ayuntamiento coincidiendo con la visita a la Ciudad del ministro de Justicia, Rafael Catalá. “Cada uno es libre de manifestarse”, ha declarado Vivas, quien se ha comprometido con los empresarios a defender el empleo vinculado a la actividad comercial y a luchar contra el fraude.

El presidente ha vuelto a negar la viabilidad de la apertura del paso de Benzú como una alternativa para solventar los problemas de congestión de El Tarajal. Según Vivas, esta posibilidad no es aceptada por Marruecos ni está recomendada por las fuerzas de seguridad españolas. “Además, no resulta conveniente facilitar que en torno a Benzú se origine una concentración demográfica que pueda significar una presión añadida”, ha advertido.

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