Victoria de Bravo, derrota de la participación

El candidato electo consigue recuperar 2.600 de los votos que perdió el presidente del partido, Juan Vivas, en las elecciones municipales celebradas en mayo del pasado año. La abstención en estas generales se ha elevado hasta el 47,4%, la más alta de cuantas se han registrado en unas generales desde 1977.

 

Bravo y familia
photo_camera El popular Juan Bravo acude al colegio electoral para depositar su voto/ ANTONIO SEMPERE

La victoria del Partido Popular ceutí en las generales celebradas este domingo no constituye, precisamente, una anomalía en el comportamiento del electorado local. Los populares han venido ganando los comicios nacionales de manera ininterrumpida desde 1993. Estas elecciones, sin embargo, sí han servido para confirmar la figura emergente de Juan Bravo, el ya diputado electo por la circunscripción de Ceuta.

El candidato al Congreso por el PP ha obtenido 15.956 votos, 1.143 más de los que él mismo consiguió en los pasados comicios de diciembre. En términos relativos, Bravo ha logrado mejorar sus resultados en 7 puntos.

Antiguo delegado de la Agencia Tributaria en Ceuta, el futuro diputado nacional llegó a la política de una manera casi impremeditada a finales del pasado año. Bajo los auspicios de Juan Vivas, presidente del partido, Bravo vino a desplazar a Francisco Márquez, quien había ocupado el escaño en el Congreso por Ceuta durante la legislatura anterior.

Su victoria en diciembre trajo para el partido un regusto agridulce. El nuevo candidato ganó las elecciones pero hubo de arrostrar una pérdida de más de 6.000 votos con respecto a las elecciones de 2011, una sangría de votos que había inaugurado siete meses antes el propio Juan Vivas en las municipales celebradas en mayo. Con todo Bravo fue capaz de mejorar en más de un millar de sufragios los resultados del factótum y referencia omnipresente del partido en la Ciudad. O dicho de otro modo, Bravo lo hizo mejor que Vivas. En sus dos comparecencias electorales en el plazo de seis meses, el diputado electo ha conseguido recuperar 2.600 de los votos que perdió el presidente del partido en los comicios a la Asamblea. Además, ha vuelto a permitir una victoria del PP con más del 50% de los votos emitidos.

La recuperación del electorado que encarna Bravo también ha tenido su reflejo en las votaciones al Senado. Los candidatos Guillermo Martínez y Fátima Hamed han mejorado sustancialmente sus resultados al sumar, respectivamente, 1.037 y 1.788 nuevos votos a los obtenidos en diciembre.

 

Participación

Si el novel político popular es el gran ganador de estas elecciones en Ceuta, la participación se ha convertido en la gran derrotada. La abstención registrada en estos comicios es la más elevada de cuantas se han registrado en la ciudad en unas generales. Hasta ayer domingo, este dudoso honor lo ostentaban las elecciones celebradas en 2011, con un 46,8%. Este 26-J, el 47,4% de los votantes ceutíes no acudió a los colegios electorales.

Estos datos están muy lejos de los registrados en 1977, fecha de la celebración de las primeras elecciones al Congreso. En aquella ocasión, el 77,6% de los ceutíes ejerció su derecho a voto.

El índice de participación en las elecciones de este domingo se situó 17,3 puntos por debajo del confirmado para el conjunto del país.