El anuncio lo ha realizado el presidente del Gobierno. Pedro Sánchez, tras el Consejo de Ministros, en el que ha hecho balance de la gestión realizada durante los dos meses de su Gobierno.
El objetivo es "optimizar" los recursos que permitan "colaborar en impedir" la salida de embarcaciones de migrantes en países de origen y "evitar la llegada inadvertida" de pateras a España.
"Este mando único centralizará la coordinación y el seguimiento de todas las actuaciones vinculadas con la inmigración ilegal y los mecanismos necesarios para la utilización eficaz de todos los recursos humanos y materiales disponibles y la rápida y oportuna transferencia de información relativa a la inmigración", ha explicado.
Sánchez ha puntualizado que este mando único será "operativo" porque las decisiones políticas las tomarán los responsables políticos. La nueva figura se centrará en la coordinación de actuaciones sobre inmigración.
Esta autoridad única se regirá por la legislación nacional e internacional vigente, así como por los convenios suscritos en materia de seguridad marítima de salvamento, protegiendo la vida de los migrantes y respetando su dignidad.
Ha recordado que, paralelamente, España ha impulsado un plan de choque de 30 millones hasta final de año para reforzar la atención a pie de playa, ampliar las plazas de atención humanitaria y crear un nuevo servicio de asistencia y derivación
Ha resumido los cuatro ejes de la política migratoria del Gobierno, entre los que ha destacado la potenciación del diálogo y la cooperación con los países de origen y tránsito de los inmigrantes y se ha referido principalmente a Marruecos, aunque también ha mencionado a Argel y Mauritania.