Cuando la vida te da una segunda oportunidad
Salieron de sus países huyendo, con el deseo de encontrar un futuro mejor, esperanzados de que la vida les de una segunda oportunidad. Ahora les toca esperar hasta que los centros peninsulares se descongestionen y puedan así continuar el camino que un día comenzaron y que no saben cuándo terminará, dónde ni cómo. Un futuro lleno de incógnitas que afrontan con ilusión.
Sin embargo, estos datos contrastan con las cifras que se han recogido en la ciudad. En Ceuta, casi 600 migrantes han conseguido acceder a la ciudad en lo que va de 2018, un 60% menos que durante el mismo periodo del año pasado, cuando entraron irregularmente 1.400 extranjeros.
En el CETI están albergados actualmente 657 migrantes, de los cuales 177 son argelinos, 53 de otras nacionalidades y la gran mayoría subsaharianos procedentes de Guinea Conakri, Gambia y Costa de Marfil.
De los 657 residentes 65 son mujeres y 21 menores.
El periodo de estancia media en el CETI ha variado mucho con el tiempo. Antes oscilaba entre los tres y los seis meses, ahora con la saturación de los centros peninsulares hay migrantes que llevan en el Centro de Estancia Temporal casi nueve meses.
La delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, atendió a cuatro representantes de los concentrados y les prometió que intentaría solucionar su situación.
Los subsaharianos desistieron y abandonaron la plaza de los Reyes con la esperanza de salir de Ceuta en el menor tiempo posible, pero ha llegado el jueves, día de salidas, y una semana más el CETI no ha trasladado a ningún residente.
Salieron de sus países huyendo, con el deseo de encontrar un futuro mejor, esperanzados de que la vida les de una segunda oportunidad. Ahora les toca esperar hasta que los centros peninsulares se descongestionen y puedan así continuar el camino que un día comenzaron y que no saben cuándo terminará, dónde ni cómo. Un futuro lleno de incógnitas que afrontan con ilusión.
Llega el buen tiempo y con él las pateras
Un recurso que cada vez se cobra más vidas de inocentes. En lo que va de año se han rescatado a casi 500 personas que viajaban en embarcaciones. En Ceuta la cifra es de 250 frente a los 59 que se rescataron el año anterior.
El verano pasado las pateras llegaron con gran asiduidad al litoral Ceuta, pero la práctica más repetida fue la utilización de las motos acuáticas. Un medio que pone en grave peligro la vida de los migrantes ya que los sueltan a gran distancia de la orilla.
Y mientras siguen llegando migrantes a la ciudad, el CETI continúa con las salidas paralizadas. Meses de reflexión en los que te das cuenta cómo la vida te ha dado una segunda oportunidad y que lo mejor está por venir.