DENUNCIAN DEPORTACIONES Y REDADAS

Asociaciones humanitarias aseguran que tres personas habrían muerto en la tentativa de salto a la valla de la pasada madrugada

Los testimonios de jóvenes que participaron en el salto frustrado a la valla de Benzú la pasada madrugada hablan de tres fallecidos en suelo marroquí y de 200 detenidos. Según estas revelaciones, las fuerzas policiales del país vecino habrían comenzado a organizar la deportación de los migrantes en autobuses que se dirigen hacia el sur. 

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photo_camera La imagen muestra a la Gendarmería marroquí durante el dispositivo desplegado esta madrugada/ ANTONIO SEMPERE

Asociaciones de derechos humanos en Marruecos han denunciado la muerte de al menos tres personas en el intento de franquear la valla fronteriza de Benzú que la pasada madrugada protagonizaba un numeroso grupo de migrantes. Según el testimonio de la activista de “Caminando Fronteras”, Helena Maleno, basado en revelaciones aportadas por jóvenes que participaron en la tentativa de salto, tres de los migrantes habrían fallecido en su empeño de alcanzar territorio español, dos de ellos ahogados en el mar.

A pesar de la confusión generada y las dificultades para establecer comunicación con los subsaharianos, Maleno ha revelado que el intento de salto ha implicado a unas 250 personas, de las cuales 200 habrían sido detenidas por las fuerzas policiales marroquíes. Mientras, los heridos más graves eran trasladados a centros hospitalarios. “Los menos graves han sido subidos en autobuses con destino al sur para su deportación”, explica la activista quien asegura que la policía del país vecino ha desplegado en la zona redadas “terribles” contra los migrantes.

Las oenegés denunciaban a última hora de esta tarde que las batidas a la búsqueda de migrantes en los bosques continuban.

Mientras, tal y como informa Europa Press, las autoridades del país vecino han negado que se produjera ninguna muerte durante el incidente, aunque sí han reconocido que sus fuerzas policiales han practicado 220 detenciones. Marruecos asegura que fue necesario el traslado de seis agentes de las fuerzas auxiliares al hospital de Castillejos. Responsables marroquíes sólo reconocen el ingreso hospitalario de tres heridos entre los subsaharianos.

 

Tentativa de salto

Las escaramuzas en territorio marroquí se iniciaron poco después de las once de la noche de ayer domingo cuando los agentes que custodian el perímetro advirtieron cómo un gran número de migrantes comenzaban a desplazarse por la zona de Beliones en lo que parecía un intento por aproximarse a la valla.

Inmediatamente, dotaciones de la Guardia Civil se desplazaron hasta la zona para reforzar el dispositivo de vigilancia en la valla. Agentes del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) y de los Grupos Especiales de Actividades Subacuáticas (GEAS) eran movilizados en previsión de que los subsaharianos consiguieran alcanzar el perímetro fronterizo.

Los migrantes se concentraban en la cabeza de la Mujer Muerta para aguardar el momento propicio de desplegarse en dirección a Beliones. El único intento de aproximación se producía en torno a las siete de la mañana, una tentativa que las fuerzas policiales marroquíes lograban abortar inmediatamente.

Las condiciones climatológicas que se han vivido esta pasada madrugada en la zona habrían limitado seriamente las posibilidades de los migrantes en el caso de que hubieran logrado acercarse a la valla. El intenso viento hacía prácticamente imposible solventar con éxito un intento de eludir el cercado por vía marítima.

Los refuerzos de la Guardia Civil en el perímetro comenzaban a retirarse a las ocho de la mañana, una vez restablecida la calma.

Los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado han permanecido vigilantes durante toda esta semana ante la posibilidad de que los subsaharianos congregados en los campamentos de refugiados pretendieran emular a sus 182 compañeros que el pasado 25 de noviembre lograron superar la valla y entrar en Ceuta. En aquella ocasión, dos de los migrantes que participaron en el intento fallecieron en territorio marroquí.